Microsoft, Premio MC 2016 al compromiso con el Open Source
Ayer se celebró en Madrid la octava edición de los Premios MC, unos galardones con los que nuestra editorial TPNet reconoce anualmente los méritos de los protagonistas del sector en diferentes categorías y que este 2016, además, nos deja con una sorpresa del todo inesperada: Microsoft Premio MC 2016 al compromiso con el Open Source.
Como seguramente sabrá el lector habitual de MuyLinux, no participamos en los Premios MC y, de hecho, tampoco lo hace MuyComputer, nuestra cabecera más popular. La razón no es otra que el enfoque profesional y de negocio de la celebración, centrada por entero en segmentos muy concretos, representados a su vez por otras importantes publicaciones de nuestra red como MuyComputerPRO, MuyPymes y MuyCanal. Sin embargo, este año se ha estrenado una nueva categoría especial con tres premios adicionales entre los que destaca sobremanera uno dedicado al Open Source, y no íbamos a dejar pasar la oportunidad de comentarlo cuando, a la postre, va para Microsoft.
En efecto, Microsoft se lleva el primer Premio MC al compromiso con el Open Source y a pesar de la inevitable sorpresa, en MuyLinux nos sentimos muy contentos de que así sea. Significa que aun sin participar directamente en la elección de los nominados y premiados, a cargo de los responsables de cada medio y otros expertos independientes, nos tienen en cuenta. Pocos sitios han seguido tan de cerca el cambio de Microsoft hacia el Open Source como nosotros y que nos hayan tenido en consideración es de agradecer.
José Bonín, director de Cloud & Enterprise en Microsoft, fue el encargado de recoger el Premio MC 2016 al compromiso con el Open Source en la gala celebrada ayer.
Así pues, deseamos que la sorpresa no nuble el juicio a nadie, porque el criterio aplicado es coherente. Al mismo tiempo, el debate sobre si Microsoft va en serio con el Open Source sigue abierto y nuestra postura ya la conocéis. Si alguien la ha olvidado, no obstante, es muy recomendable que repase ese enlace porque en el mundo del software libre las cosas son blancas o negras; en el mundo del Open Source no.
Aunque en término final todo se articula en torno a las mismas licencias, metodología y filosofía no cuadran siempre, y este es uno de esos casos. “El Open Source solo funciona si todo el mundo contribuye por sus propias razones personales y egoístas” dijo en su momento Linus Torvalds, y ese y no otro es el motivo por el que el modelo de desarrollo Open Source ha arraigado en la empresa, de Red Hat a SUSE, de Oracle a Microsoft. Pero, y esto es digno de mención, el beneficio común se mantiene.
El Open Source en la empresa es hoy en día el motor de la innovación, el proceso que permite agilizar la evolución de nuevas tecnologías como nunca antes, y Linux es la piedra angular de todo el entramado. Así lo entendieron en Microsoft hace ya bastantes años, si bien es cierto que no ha sido hasta más recientemente que el gigante del software se ha metido de lleno en… el futuro, sí.
Haciendo un breve repaso a la marcha de Microsoft en este sentido, en 2009 comenzaron a contribuir con Linux, aunque fue más tarde cuando el chip de la compañía cambió de pleno y lo demostraron con Azure desde el día uno, dando soporte poco a poco a cada vez más sistemas basados en el núcleo Open Source. Luego llegó el soporte de contenedores Docker, después la disponibilidad de .NET para Linux, que terminarían liberando en parte importante; y lo mismo sucedió con Visual Studio Code o PowerShell. Lo último, la beta abierta de SQL Server y el paso más llamativo de todos, cuando Microsoft se unió a la Linux Foundation.
¿Son los ejemplos anteriores motivos de suficiente peso como para otorgar a Microsoft el beneficio de la duda? Porque hay muchos, muchos más: la implementación de ChakraCore o los diseños para la próxima generación de hardware para la nube de son dos al margen de la corriente principal, y siguen habiendo muchos más. La muestra más reveladora es que la empresa que un día defendió el software privativo a capa y espada, hoy está a la cabeza en el número de contribuciones de código abierto nada menos que en GitHub.
Por supuesto, Microsoft actúa de acuerdo a sus intereses. O sea, exactamente igual que cualquier otra empresa. Lo cual no tiene por qué suponer algo negativo. Lo explicábamos antes con palabras de Linus Torvalds, pero se explica mejor con los hechos mencionados. A este respecto cabe señalar que la compañía contribuye de otras maneras y, por citar una de la que fuimos testigos in situ, fue una de las patrocinadores de la última SUSECON, donde tuvo fuerte presencia.
Voces de Microsoft que han explicado el porqué del nuevo rumbo también hay unas cuantas, incluyendo la del CEO Satya Nadella. Retomando el ejemplo de SUSECON, sin embargo, una de las más cualificadas para hacer comprensible la transformación vivida por la firma es la de Michael Kelley, responsable de Azure: “Desde el punto de vista de Microsoft es una cuestión de ir a donde nuestros clientes están“, dijo el que fuera responsable de dar la bienvenida a Debian y otras distribuciones GNU/Linux a la nube de Microsoft; y es que los clientes de Microsoft están en Linux.
Es obvio que para el usuario de GNU/Linux, aquel que además de por la tecnología se rige por la filosofía del software de código abierto, todo esto no es suficiente. Y aspirar a más no es malo: Office para Linux, Windows Open Source… Sin duda, a Microsoft le queda un largo camino por recorrer. Pero han cogido carrerilla y en un año han avanzado más que en toda su historia, razón por la cual este Premio MC, en los términos descritos, está bien concedido.
Felicidades a Microsoft por su compromiso con el Open Source. Esperamos ver mucho más.