Internet, tal como lo conoces, con todo ese entramado de páginas webs y servicios, no es algo etéreo. Es algo tangible y se encuentra alojado en servidores. Y, al igual que no dejarías un objeto preciado en cualquier lugar, tampoco deberías descuidar dónde alojas tu plataforma web. Por eso, deberías conocer los mejores servidores dedicados que existen.

Existen multitud de proveedores de servidores dedicados, con multitud de servicios y tarifas diferentes. Eso dificulta la elección, por lo que deberías conocer todos los detalles para poder elegir el mejor para tu caso particular y así sacarle el máximo partido…

¿Que son los servidores dedicados?

A la hora de elegir un hosting, u hospedaje, cuando se necesita espacio en la nube para subir una página web/servicio, una de las dudas más frecuentes es saber qué es un servidor dedicado (dedicated server). Tener esto claro es vital para elegir la mejor empresa y servicio web host, permitiendo exclusividad y un mejor control de tu espacio web.

Los servidores dedicados son una opción muy completa y exclusiva para particulares, autónomos y empresas que buscan un hosting web. Por eso, se han transformado en una de las modalidades más demandadas en la actualidad.

Aparentemente, puede parecer similar a un servidor compartido, pero no lo es. En el servidor compartido, un mismo servidor se comparte para varios clientes. Dicho de otro modo, todos los sitios de esos clientes están usando los mismos recursos de hardware de un mismo equipo.

Los servidores web compartidos pueden estar bien para ciertos sitios que consumen pocos recursos y que son pequeños. Pero si crecen o son demasiado grandes, la mejor opción es disponer de un servidor web dedicado. Es decir, aquel en el que el servidor o máquina está dedicada únicamente a una cuenta, pudiendo disfrutar de todos los recursos.

Actualmente, la diferencia entre un servidor compartido y dedicado se han diluido, ya que, con la aparición de los VPS (Virtual Private Server), lo que se hace es usar un mismo servidor para todos los clientes, como los compartidos, pero con las ventajas de uno dedicado al alojar cada proyecto independiente en una máquina virtual.

Este tipo de servicios son los más habituales en la actualidad. Permiten a los grandes centros de datos compartir los enormes recursos de la máquina con los clientes. De forma que cada uno tenga su espacio virtual particular, con sus recursos de vRAM, vCPU, almacenamiento virtual, interfaces de red virtual, etc. Eso permite también ampliar el servicio y obtener más recursos si se requiere, sin necesidad de cambiar de servidor físico.

Además, presentan otra ventaja adicional, y es que si a uno de esos VPS le ocurre algo, no afectará al resto. Eso es gracias a que, aunque todos los clientes están usando la misma máquina física (servidor), con VPS se particionan los recursos para obtener varios servidores virtuales que trabajan como una máquina independiente, con su asignación de recursos, sistema operativo, software, etc.

Hosting dedicado vs servidor dedicado

En ocasiones, algunos clientes tienen la duda de si es lo mismo un hosting dedicado y un servidor dedicado. Realmente, cuando se te ofrece uno u otro servicio se suelen estar refiriendo a lo mismo, se usan como sinónimos.

Aunque, si somos estrictos, el servidor dedicado es una máquina conectada a Internet que puede proveer de algún tipo de servicio a sus clientes. En cambio, el hosting se refiere específicamente a un alojamiento web dentro de un servidor. Como he comentado antes, dentro de ese servidor se pueden alojar varios hostings si es compartido, o si es dedicado mediante VPS.

Actualmente, algunos servicios de computación en la nube son bastante amplios, y pueden ofrecer tanto hosting como también otros servicios: cómputo, estancias para usar sistemas operativos y apps, etc. (véase IaaS, SaaS, PaaS,…).

La importancia de una transición digital

Antes de la llegada de la pandemia del SARS-CoV-2, la transformación digital de las empresas era muy importante. Pero tras la Covid-19, ya casi no es una opción, sino una obligación. Poner las nuevas tecnologías al servicio de tu negocio pueden hacerte reducir costes y mejorar las ganancias.

Y uno de los primeros pasos para comenzar esa transformación en tu negocio de autónomo, o en tu PYME, es crear una página web y buscar alojamiento para ella. Solo así comenzarás a llegar a todas esas personas a las que ahora no llega tu servicio o producto. Ya sea porque se encuentran geográficamente alejadas, o porque no pueden acudir físicamente a tu establecimiento por las restricciones.

Otros beneficios de esta transición pasan por:

• Puedes obtener más datos y estadísticas sobre tus potenciales clientes. Eso te permitirá conocer mejor lo que necesitan, tomar mejores decisiones, o cómo mejorar tu plan de marketing.
• La digitalización también simplifica mucho la organización de un negocio. Podrás gestionar tu negocio online con multitud de herramientas de software que automatizan muchos procesos, como las plataformas de e-commerce, las aplicaciones colaborativas, etc.
• Adaptarse mejor a los cambios, gracias a la recogida en tiempo real de datos. Esa capacidad de reacción anticipada es vital en épocas de incertidumbre o coyunturas como ésta crisis.
• Permite descentralizar el trabajo, y facilita el teletrabajo.
• A veces evita tener que operar desde un local, por lo que una web puede ahorrarte el alquiler del establecimiento, facturas de luz, agua, mobiliario, etc. Esto también tiene un impacto en los precios, que se volverán más competitivos al no tener que incluir esos gastos en los márgenes de beneficios.
• Mayor alcance de tu negocio. Mientras antes solo llegabas a los ciudadanos próximos a tu negocio, ahora podrás llegar a todo el mundo.
• Mejorará la imagen de tu empresa y tendrás clientes más satisfechos con los servicios.
• Más agilidad, reduciendo los procesos burocráticos.
• Etc.

Ventajas y desventajas

Disponer de un servidor dedicado tiene sus ventajas y desventajas, como casi cualquier servicio.

Si nos referimos a las ventajas, destacan:

• Exclusividad: no tienes que compartir recursos, la máquina estará totalmente dedicada a ti. Eso otorga independencia, escalabilidad, y mayor rendimiento.
• Control: puedes administrar el servidor como desees.
• Seguridad: al no compartir recursos con otros proyectos, estarás menos expuesto a ciertas amenazas.
• Mantenimiento: los servidores dedicados tienen un mantenimiento más simple, ya que en los compartidos, o VPS, se complica algo más.
• Flexibilidad: es más versátil, pudiendo dedicar el espacio y recursos a lo que realmente necesitas, con una enorme cantidad de plataformas y gestores de contenidos. Incluso podrás elegir el sistema operativo del servidor con mayor libertad…

También tiene sus desventajas:

• Precio: al ser dedicados son más caros que los hostings compartidos o servidores VPS. Aunque, merece la pena debido a las prestaciones que ofrecen.
• Dificultad: si se va a gestionar un servidor completo, se debería tener formación adecuada. Aunque muchos servicios en la nube suelen  hacer las tareas de mantenimiento y administración básica por ti.

Entonces ¿debo contratar un servidor compartido?

Por lo general, si simplemente quieres una pequeña web, blog, o similar con poco tráfico, no tienes la necesidad de contratar un servidor dedicado. En cambio, los servidores dedicados si son la mejor opción para webs de servicios, tiendas online, y otras plataformas de amplias capacidades (gran volumen, alto número de visitas o tráfico de datos elevado,…).

También es apropiado para aquellos proyectos que tal vez comiencen siendo pequeños, pero tienen previsión de crecer mucho. Eso no les generará limitaciones a largo plazo en cuanto a los recursos.

Cómo elegir un servidor dedicado

Un servidor no es más que un computador de altas capacidades. Por ende, cuando vas a elegir servidores dedicados, te debes fijar básicamente en los mismos aspectos técnicos que cuando compras un PC:

• CPU: los servidores suelen tener varios microprocesadores, es decir, varios cerebros principales. De ellos va a depender el rendimiento a la hora de ejecutar el sistema operativo y software que se aloje en el servidor. Por tanto, es importante que tengan un buen rendimiento. En el caso de un VPS, será una vCPU, es decir, una CPU virtual.
• Memoria RAM: la memoria principal también es importante, de ella también dependerá la agilidad con la que se mueve todo. Con una memoria lenta, con alta latencia, o de baja capacidad, la CPU no podrá hacer maravillas. La cantidad necesaria dependerá mucho de cada caso particular, ya que no todos los clientes necesitan lo mismo.
• Almacenamiento: el disco duro es otra de las partes esenciales. Algunos servidores dedicados siguen usando discos duros magnéticos (HDD), los que serán más lentos, pero suelen tener más altas capacidades. Otros han comenzado a usar discos duros de estado sólido (SSD), con  unas velocidades mucho más elevadas. Por lo general, no te tienes que preocupar por la fiabilidad en ningún caso, ya que emplean sistemas RAID. Esos sistemas redundantes hacen que si falla algún disco, se pueda sustituir sin perdida de datos.
• Sistema operativo: puede ser Windows Server, o alguna distribución GNU/Linux. En raras ocasiones también puedes encontrarte con otros sistemas tipo UNIX, como Solaris, *BSD, etc. Por su robustez, seguridad, y estabilidad, en muchos se ha impuesto Linux, además de por tener unas necesidades de mantenimiento y administración bastante bajas.
• Transferencia de datos: hace referencia a volumen de datos que pueden transferirse a través de las líneas de conexión en red de estos servidores. Es algo que los proveedores suelen limitar en algunos servicios, o que tienen ilimitado en otros más caros. En cualquier caso, se debería ajustar al que tú necesites por las visitas o transferencias que vas a hacer.

Otras cuestiones que te pueden interesar son el tipo de panel de control que tiene, u otras facilidades que te puedan aportar, como el registro de dominios, servicios de correo electrónico, bases de datos, etc.

Importancia del GDPR

Seguramente has escuchado hablar de GAIA-X, un interesante proyecto europeo para una plataforma de la nube que cumpla con las exigencias de la ley de protección de datos europea. Algo importante para respetar el derecho a la privacidad y mantener los datos en territorio europeo (o en su defecto, que cumplan con la GDPR).

Si eso es vital en el caso de particulares, lo es aún más cuando se manejan datos sensibles en una empresa, o de los clientes de ésta. El problema es que encontrar servicios que cumplan con estas leyes y que sean competitivos es algo complicado. Más aún teniendo en cuenta la enorme influencia y poder de las llamadas GAFAM (Google, Amazon, Facebook, Apple, y Microsoft).

Buscar servidores dedicados alojados en centros de datos dentro de Europa, y que sean competitivos no es sencillo. Un ejemplo puede ser Ikoula., un especialista en alojamiento web, servidores dedicados, y cloud computing. Además, cuentan con una dilatada experiencia desde 1998.

Sus centros de datos están en Francia, en dos localizaciones en Reims y Eppes, así como en Holanda y Alemania (también EE.UU. y Singapur, pero puedes elegir si tienes preferencias). Centros que son de propiedad, y no parcelas alquiladas como ocurre en algunos otros servicios. Además, cuenta con filiales en Países Bajos y España. Además, cuentan con un buen servicio de asistencia 24/7 multilingüe a tu disposición.

Entre los servicios de Ikoula destacan:

• VPS
• Nube pública
• Servidores dedicados
• Hosting web
• Correo electrónico profesional y dominios web propios
• Certificados SSL/TLS para la seguridad
• Backup en la nube
• Interfaces sencillas para la gestión

Además de eso, te gustará por otras cualidades como:

• Emplear proyectos de código abierto y libres como Kubernetes.
• Ser eco-respondable, siendo más respetuosos con el medio ambiente al usar energía 100% renovable en sus centros de datos (recuerda que los data center consumen ingentes cantidades de energía, y esto es vital).
• Apoyan las start-ups, lo que puede ser un buen impulso si estás empezando.