Denuncia contra SUSE por discriminación
El mundo del software libre y código abierto no escapa a la realidad general. Los seres humanos son iguales en todas partes y su interacción genera siempre los mismos conflictos. En general, la blógsfera linuxera no suele hacerse eco, salvo que involucre a personajes muy conocidos, pero tenemos nuestro porcentaje de denuncias de acoso y discriminación.
En este caso, un exempleado denuncia a SUSE por discriminación.
No se trata de una denuncia cualquiera, después de que IBM comprara Red Hat, SUSE Software Solutions Germany GmbH. es la compañía independiente más grande del mundo Linux. Además, se trata de una empresa alemana y la denuncia es por discriminación contra le religión judía.
Es cierto que hoy la empresa tiene otro propietario y otra persona como máximo ejecutivo, pero el denunciante sostiene que las actuales autoridades no hacen nada para cambiar la situación.
La denuncia contra SUSE
Quien hace la denuncia es Bryan Lunduke un ex empleado de SUSE. Según sus propias palabras este fue su rol dentro de la empresa:
En el año 2013, me uní a SUSE, específicamente al equipo de marketing.
Durante el tiempo que trabajé para SUSE (la empresa de Linux más antigua del mundo), fui, sin lugar a duda, la persona con más visibilidad pública dentro de la empresa.
No solo llevé conmigo una audiencia considerable cuando me uní a la compañía, sino que luego: Fui elegido miembro de la junta de openSUSE, representé a SUSE en conferencias (y en entrevistas) en todo el país y creé algunas de las campañas publicitarias más exitosas en la historia de SUSE . (y Linux) . mi nombre y mi marca personal quedaron estrechamente ligados a SUSE. Era ampliamente considerado como la persona de consulta para todas las cosas relacionadas con el marketing de SUSE que tuvieran que ver con Linux.
Una de las cosas que hicieron Bryan y su equipo fue difundir Linux con mensajes alusivos a los días festivos, Todavía puede verse en el blog de SUSE un cartel titulado «Cómo Linux salvó la Navidad».
Siendo él mismo de religión judía, Lunduke notó que nunca habían publicado ningún mensaje relacionado con sus festividades, es por eso que en el año 2015 hizo una publicación de ¡Feliz Janucá! que apareció en las redes sociales de la empresa.
Janucá se celebra, dependiendo de la conversión entre el calendario lunar hebreo y el Gregoriano) entre fines de noviembre y principios de diciembre) y conmemora que, durante la purificación del Segundo Templo de Jerusalén, la lámpara que lo iluminaba se mantuvo iluminando durante ocho días cuando solo tenía aceite para uno.
Cuenta el denunciante que inmediatamente recibió instrucciones del jefe de marketing (algunos puestos por encima de la jerarquía) de que quitara esa publicación, aclarándole en forma específica que debía dejar toda las demás. Para demostrar que no tenían nada contra el resto de las fiestas, inmediatamente se envió a todo el personal un mail invitando a todos los empleados a cantar villancicos en la oficina.
La actitud de la empresa
Bryan Lunduke dice que siguiendo los canales jerárquicos planteó su preocupación a su inmediato superior que lo transmitió por la cadena de mandos. Su superior fue despedido y lo mismo sucedió con su reemplazante por el mismo motivo. ¿Qué pasó con el jefe de marketing?. Fue ascendido.
En cuanto al propio Bryan, según manifiesta, fue reprendido, retirado del equipo y se le negó un aumento de sueldo. De todas formas, siguió insistiendo hasta llegar al máximo ejecutivo y logró que se iniciara una investigación. El resultado de esta fue que no existió discriminación.
Pero, las quejas no terminan ahí.
Bryan, como responsable de las redes sociales y principal vocero de la compañía tenía que estar en SUSECON, la conferencia anual de la empresa. Por algún motivo alguien decidió programarla en la semana entre Rosh Hashaná y Yom Kippur (Las dos festividades más importantes del pueblo judío (*)). La clausura era precisamente el día de Yom Kippur que es específicamente no laborable.
Finalmente, después de lo que califica de intimidaciones, el ejecutivo dejó la empresa y guardó silencio hasta el 2022 cuando ya la firma tenía una nueva presidente y un nuevo propietario.
Después de que se nombró a la nueva directora ejecutiva, me acerqué a ella. De una manera amable, le hice saber que me habían obligado a dejar la empresa después de la discriminación contra los judíos (y una política de prohibición de hablar públicamente de los judíos). Y que quería que ella estuviera al tanto de los problemas pasados para que pudiera asegurarse de que no les sucedieran a otros en el futuro.
La nueva CEO de SUSE respondió bloqueándome en Twitter.
El denunciante afirma tener conocimiento por actuales empleados de que las prácticas discriminatorias continúan.
No está al alcance de un simple bloguero determinar la veracidad de lo denunciado. Simplemente puedo darle difusión para que lo que realmente sucedió se aclare completamente.
*Cualquier corrección sobre inexactitudes en las referencias a las celebraciones de la religión judía es bienvenida.