Cómo instalar zoom en Linux
Las videollamadas vía Internet han estado disponibles desde siempre, o por lo menos desde que yo lo conozco. Clientes de mensajería como MSN o Yahoo! Messenger ya permitían compartir «cam» y el sonido del micrófono, pero no fue hasta la llegada de los teléfonos inteligentes que empezaron a usarse un poco más. Aún así, el boom real lo pegaron al inicio de la década de los ’20 (2020), cuando la pandemia de la COVID19 también nos obligó a teletrabajar. Se han usado muchas opciones, pero Zoom ha sido de las más populares.
Los diferentes medios que conocían a Zoom desde sus inicios no se ponen de acuerdo de por qué esta fue la opción elegida por muchos. Si se busca por la red, hay respuestas de todo tipo, como un buen marketing que incluye el nombre de la aplicación, muy descriptivo, o que ha sido de las primeras en aparecer. Pero pocos suelen explicar su crecimiento con la pandemia, ya que antes de 2020 ya estaba subiendo mucho. Por el motivo que sea, la realidad es la que es, y hay mucho interés en Zoom.
Qué nos ofrece Zoom
Zoom ofrece muchos productos, pero básicamente todo gira alrededor de las comunicaciones a distancia. Lo que más conocemos son las videoconferencias, pero no todas son iguales. No es lo mismo una videollamada de una persona a otra que una en la que participan decenas de usuarios. Ni tampoco lo es verse sólo las caras que incluir la opción de usar una pizarra virtual, muy útil para dar/recibir clases. La captura anterior habla por sí sola.
Sabiendo que podemos comunicarnos a distancia, usando sólo el chat, el micro, la cámara o todo junto, y usar sus diferentes herramientas, lo que quizá queda por saber es por cuánto lo ofrecen. Zoom está disponible para un uso personal y para hacer un uso profesional de la plataforma. El plan básico es el que nos va a permitir hacer reuniones de hasta 100 personas, siempre y cuando no se pase de una duración de 40 minutos, sin tener que pagar ni un euro. Luego hay tres planes de pago, el Pro, el Business y el Enterprise, cada uno con más opciones que el anterior, pero por un precio más alto.
Si lo que necesitamos es hacer un uso más serio de Zoom, la opción Pro nos costará, a día de publicación de este artículo, 140€ por usuario al año. Es dinero, pero esos planes están pensados para los que necesiten hacer reuniones de empresa serias. Para un uso normal, el plan básico es más que suficiente. En el peor de los casos, se vuelve a llamar superados los 40 minutos.
Instalación en Linux
Gracias a los paquetes de nueva generación, instalar Zoom en Linux es muy sencillo, también de explicar. Podemos instalarlo como paquetes flatpak y snap, y esto es válido para cualquier distribución que soporte de fábrica o se le haya añadido el soporte para este tipo de paquetes.
En este enlace se explica cómo añadir el soporte de los paquetes flatpak, y en este para los paquetes snap. Una vez añadido, ambas opciones deberían aparecer en los diferentes centros de software. Si buscamos por nuestro centro de software y no encontramos nada, se puede instalar con estos comandos:
- Paquete snap:
sudo snap install zoom-client
- Paquete flatpak:
flatpak install flathub us.zoom.Zoom
En ambos casos estaremos instalando software que ha pasado por las manos de la comunidad, siendo el primero el paquete DEB oficial para Debian/Ubuntu que se ha empaquetado como paquete snap.
Descargar el paquete oficial
En la página de descargas podemos conseguir los paquetes que ofrece la misma compañía, entre los que hay DEB, RPM y un tarball, este para distribuciones como Arch Linux. Para los usuarios de Arch, también está disponible en AUR en lo que para mí es la mejor opción; no sólo es más fácil de instalar (yay -S zoom, como explicamos en este tutorial), sino que también lo es de actualizar.
Para instalar la versión DEB (Debian/Ubuntu y derivados), bastará con abrir un terminal y escribir:
sudo dpkg -i "nombre del paquete"
Para instalar el paquete RPM, lo más habitual será escribir:
sudo rpm -i "nombre del paquete"
En cualquier caso, se puede hace doble clic en los archivos y elegir que se instalen con el instalador gráfico, si nuestra distribución ofrece esta posibilidad.
Versión web
Zoom también está disponible en versión web para los que no quieran o no puedan instalar el software. La página es zoom.us/join, en donde habrá que añadir el usuario y contraseña para poder empezar a usar todo lo que Zoom nos ofrece.
Alternativas
Zoom es una de las opciones más populares, pero no al única. También podemos usar otras, como:
- Telegram: la aplicación de mensajería sirve para hacer videollamadas, aunque está más centrada en el uso personal.
- Skype: sorprende un poco que Zoom haya superado a Skype en popularidad, por lo menos si tenemos en cuenta las fechas en las que nacieron las aplicaciones. Skype fue comprada por Microsoft para sustituir (y de paso matar) a su MSN.
- Google Meet: Google también tiene su aplicación de videollamadas, y también sirve para tener reuniones de todo tipo. Que no sea más popular puede tener que ver con una cuestión de privacidad, o por la manía de esta compañía de cambiarle el nombre a las cosas.
- Teams: también de Microsoft, Teams nos permite realizar videollamadas y tener reuniones a distancia.
- Discord: es una de las opciones favoritas por las diferentes comunidades Linux, en parte porque se pueden crear como una especie de servidores con diferentes chats separados por temas.
- Signal: tampoco puede quedar fuera de esta lista esta aplicación centrada en la privacidad, aunque, como Telegram, también está más centrada en el uso personal.
- Brave Talk: si usamos el navegador Brave, además de navegar también podremos hacer otras cosas. Entre ellas, videollamadas privadas. Lo malo es que tenemos que hacerlas desde el navegador web… su navegador web.
Se elija lo que se elija, una cosa está clara: la distancia no es excusa para no ser productivos o para tratar más con amigos y familiares.