Le he hecho caso a Plasma 6 y he aumentado la autonomía de mi portátil. Así lo he conseguido
Plasma 6 llegó el pasado 28 de febrero, pero algunos usuarios tuvimos que esperar un poco más para poder disfrutarlo. Yo lo estoy usando desde hace unas dos semanas, y mis impresiones sólo podrían ser más positivas si no hubiera experimentado ningún error. No estoy peleándome con ninguno serio, y en general estoy contento.
Y más que lo estoy por la nueva autonomía de mi portátil. Esto no es nuevo, es decir, no hay nada, por lo menos con nombre y que destacar, que haga que la batería aguante más al subir a Plasma 6. Pero sí que aparece un aviso en el widget de la batería que informaba de que hay disponible un perfil de energía que podría ayudar. Esto es lo que he empezado a usar, y merece mucho la pena. Como dato, el paquete del que hablaremos más adelante también está para Plasma 5.
Los perfiles de energía de Plasma 6
Esto es algo que también está disponible en GNOME, y creo que por defecto, sin instalar nada. En Plasma… pues tengo dudas, para qué mentir. Yo no tenía instalado el paquete necesario para ver y poder elegir el perfil de energía, y no lo instalé hasta que vi esa información en Plasma 6.
Sabía que existía, pero me negaba a usarlo. El motivo era que no quería tener que estar pendiente de ello. En alguna ocasión había estado trabajando con el perfil de ahorro y sentía que todo iba a trompicones, por lo que decidí, mal hecho, hacer que fuera el sistema operativo el que eligiera qué hacer en cada caso. Por la autonomía de antes y la de ahora, parece que no usarlo es como si estuviera siempre al máximo, en modo rendimiento.
Hay tres perfiles, y cada uno tiene su razón de ser:
Ahorro de energía
Esto es lo que hay que usar si se quiere alargar al máximo la autonomía. Si se pretende hacer cualquier trabajo mínimamente exigente, y aquí podemos incluir trabajar con el navegador web, vamos a sentir cierto lastre. Pero si queremos usar un programa que no consuma muchos recursos, es la opción que debemos elegir. En mi caso, la batería, que ahora tiene una salud de algo menos del 80%, se acerca a las 5 horas, más o menos la original de cuando lo compré.
Equilibrado
Es lo que más suelo usar ahora cuando no tengo el portátil conectado a la red eléctrica. La autonomía ha pasado de algo más de una hora cuando no usaba nada a superar las tres. Me permite incluso usar una máquina virtual, tarea que reducirá algo el tiempo, claro, y sólo noto menos velocidad al realizar otras, pero nada exagerado. Como su nombre indica, hay buen equilibrio.
Rendimiento
También como indica su nombre, es lo que hay que elegir si esperamos rendimiento. En mi caso, la batería dura un suspiro, y por eso evito usarlo a no ser que esté conectado a una toma de corriente. Así va como tiene que ir por su hardware.
Plasma 6 sí debería consumir menos por el medio ambiente
KDE se propuso hace tiempo respetar más el medio ambiente, y si un equipo consume menos y tardamos más en retirarlo a él o su batería, contaminaremos menos. Todos ganamos. Por lo tanto, es posible que parte de la mejoría esté relacionada con esto.
Si no veis la opción para elegir el perfil de energía, lo que hay que hacer es instalar el paquete power-profiles-daemon
de los repositorios oficiales y reiniciar. Veréis algo como lo de la captura de cabecera. Si alguien está pensando que la imagen contradice parte de lo publicado en este artículo, ya que muestra que con el 21% de batería sólo aguantaría 36 minutos, lo que daría «sólo» tres horas, que mire a la izquierda: entre las aplicaciones que tengo abiertas está Cajas, de GNOME; estoy con Windows de fondo intentando actualizar el sistema.
Lo único malo es eso de tener que recordar poner el perfil que toca en cada momento, aunque algo se puede configurar desde Preferencias del sistema, pero si la autonomía mejora tanto, creo que merece la pena.