Plex vs Jellyfin: guía completa para elegir tu servidor multimedia
Elegir entre Plex y Jellyfin es una de esas decisiones que marcan cómo vas a disfrutar de tu colección multimedia en casa y fuera de ella. Ambos convierten tu PC, NAS o servidor en un centro que sirve vídeos, música y fotos a tus dispositivos, y sí, permiten montarte un Netflix casero sin depender de terceros.
La competencia entre ambos es real: Plex ha liderado durante años con una experiencia muy pulida, aplicaciones oficiales para casi todo y un ecosistema bien atado, mientras que Jellyfin ha irrumpido como alternativa de código abierto, gratuita y centrada en la privacidad, con la comunidad como motor del proyecto.
Qué son Plex y Jellyfin y para qué sirven
Ambos son servidores multimedia cliente-servidor que organizan tu biblioteca local con metadatos, carátulas y descripciones, y la entregan a clientes en móviles, teles, consolas u ordenadores. El objetivo es reproducir tu contenido donde quieras, sin mover ficheros a cada dispositivo.
Plex es software privativo con servicios añadidos; su servidor indexa tus archivos y ofrece funciones extra como canales de TV gratuitos, recomendaciones, contenido en streaming y opciones sociales. Jellyfin, en cambio, es completamente FOSS y se centra en tu biblioteca: lo que está en tu servidor es lo que verás, sin añadidos comerciales.
Filosofía y modelo: empresa vs comunidad
Dos conceptos conviven aquí. Plex está desarrollado por una compañía, con recursos y un plan premium (Plex Pass) que desbloquea funciones avanzadas. Jellyfin nace de una bifurcación de Emby en 2018 y se mantiene por colaboradores; no hay suscripciones ni anuncios, y todo su código es auditable.
Esto se traduce en sensaciones distintas: Plex apuesta por el acabado y el brillo, con una experiencia unificada entre plataformas; Jellyfin ofrece libertad, control y coste cero, a cambio de aceptar que algunas características pueden llegar más tarde o no estar tan integradas.
Funciones: puntos fuertes y limitaciones
Plex destaca por amplitud de características. Integra TV y DVR (de pago), catálogo de pelis y series gratuitas, más de 200 canales de TV en directo, búsqueda/descarga de subtítulos incorporada, control parental, descargas offline en clientes, Watch Together, Webhooks y un panel de servidor sólido.
- Ventajas clave de Plex: metadatos muy precisos, transcodificación automática, apps oficiales abundantes, experiencia pulida, contenidos online, y soporte para todos los formatos habituales.
- Limitaciones de Plex: muchas funciones interesantes requieren Plex Pass; no dispone de Cloud Sync, la personalización y los plugins de terceros tienen menos recorrido, el audio gapless no está soportado y algunos usuarios critican la atención al cliente.
Jellyfin ofrece mucho sin pasar por caja. Es gratis en servidor y clientes, gestiona metadatos, admite plugins, soporta Live TV y DVR, SyncPlay, múltiples formatos y transcodificación por hardware sin coste adicional, algo que en Plex está detrás del pase premium.
- Ventajas clave de Jellyfin: código abierto, privacidad total sin cuentas externas, transcodificación por hardware libre, clientes en múltiples plataformas y opción portable con runtime .NET.
- Limitaciones de Jellyfin: no trae búsqueda/descarga de subtítulos integrada (se suele usar Bazarr), algunos metadatos requieren afinar proveedores o plugins, y hay complementos desactualizados como el de saltar intros; la función de saltar anuncios no está tan depurada.
Rendimiento y transcodificación
En velocidad ambos van sobrados para bibliotecas bien preparadas y redes en buen estado. Jellyfin puede sentirse más ligero en equipos antiguos porque no arrastra contenido ni módulos que no uses, mostrando solo lo que tienes en tu servidor.
La transcodificación marca diferencias: si dependes de transcodificar a menudo, Jellyfin permite usar GPU/Quick Sync/VA-API sin pagar, mientras que en Plex el uso de hardware para transcodificar está ligado al Plex Pass. En equipos modestos, evitar transcodificación por software es clave para no saturar la CPU.
Aplicaciones y compatibilidad
Plex gana por despliegue de apps oficiales: servidor para Windows, macOS, Linux, NAS de múltiples marcas, Raspberry Pi e imagen Docker; clientes para Android, iOS, web, PlayStation, Xbox, Tizen, webOS y más, con una experiencia homogénea.
Jellyfin cubre casi lo mismo con matices: servidor para Windows, Linux, macOS y Docker; clientes en PC, móviles y televisores. No obstante, por su naturaleza abierta, muchas apps son de terceros y la experiencia varía. En Xbox y webOS hay clientes tipo webapp que pueden ir justos con 4K, mientras que la app de Android TV suele ser la mejor opción.
En escritorio conviene apostar por Jellyfin Media Player, que usa la interfaz web pero sustituye el reproductor por MPV para maximizar el Direct Play. También existe MPV Shim para castear desde Jellyfin a un PC con gran compatibilidad.
Instalación y creación de bibliotecas
Jellyfin facilita separar servidor y clientes. Descargas el servidor para tu sistema, lo instalas con un asistente sencillo, creas usuario, nombras el servidor y vas añadiendo bibliotecas definiendo tipo, carpetas y proveedores de metadatos. Luego bajas los clientes que necesites y listo.
Plex también es directo de instalar, con un instalador claro y más variedad de plataformas soportadas. Algún usuario ha reportado trabas recientes al crear bibliotecas en ciertas versiones, resueltas volviendo a una versión previa; fuera de estos casos puntuales, la configuración es rápida y el cliente móvil detecta bien las librerías.
Organización de archivos: Jellyfin es más estricto. Para un scraping preciso, conviene separar pelis y series en carpetas distintas y seguir la estructura esperada para episodios y temporadas. Jellyfin puede guardar metadatos junto a los ficheros, útil si pruebas sin tocar la biblioteca que usas con Plex.
Interfaz y experiencia de uso
Plex ofrece una UI muy pulida y moderna, con diseño afinado, navegación coherente y metadatos de alta calidad. La sensación es la de una plataforma OTT, con extras y secciones que van más allá de tu biblioteca local.
Jellyfin apuesta por una interfaz sencilla con modo oscuro. Es clara y rápida, pero la exactitud de metadatos puede requerir ajustes manuales o plugins. La curva de aprender a instalar y afinar complementos existe, aunque tras el primer intento se vuelve pan comido.
Sobre complementos, hay diferencias notables. El motor de plugins de Jellyfin ha quedado algo atrás para algunas extensiones populares; el plugin de saltar intros y créditos, por ejemplo, está abandonado. Plex, por su parte, ha incorporado de forma nativa o premium funciones similares como saltar intros, pero atadas al Plex Pass.
Privacidad, acceso y dependencia de servicios
Jellyfin es verdaderamente autoalojado: no requiere crear cuentas en servicios externos ni comunicarse con servidores de terceros para iniciar sesión. Esto reduce superficie de exposición y te da un control total del entorno.
Plex necesita cuenta para gestionar el acceso y conectar clientes, algo que simplifica la vida a quien quiere cero complicaciones en remoto, pero añade una capa de dependencia del proveedor. Además, integraciones de streaming y TV añaden lo que algunos ven como bloat y otros como valor añadido.
El acceso remoto en Jellyfin recae en ti. Si quieres salir de tu red, lo recomendable es montar un VPN o un reverse proxy; abrir puertos en el router sin más expone el servidor a bots y no es buena práctica. En Plex, el acceso externo suele ser más plug and play gracias a su infraestructura.
Modelo de negocio y riesgos percibidos: hay usuarios que temen que Plex mueva funciones tras el muro de pago para impulsar el Plex Pass o que, si la empresa falla, ciertos servicios dejen de funcionar. No es un problema actual, pero es una preocupación citada frente al enfoque comunitario de Jellyfin.
Precio y planes
Jellyfin es gratis de arriba abajo, con servidor y clientes sin coste, Live TV y DVR sin pagar, y sin funciones bloqueadas por suscripción. Si quieres contribuir, puedes donar, ayudar con documentación o soporte en la comunidad.
Plex se puede usar gratis, pero su pase premium desbloquea hardware transcoding, Live TV y DVR, descargas offline, control parental, Webhooks, extras y mejora general de control multimedia. Los precios que verás en las fuentes oscilan en torno a 5 € o 4.99 USD al mes, 40 € o 39.99 USD al año, y 120 € o 119.99 USD para el pase vitalicio.
Compatibilidad, soporte y ecosistema
Plex presume de cobertura total en sistemas operativos de escritorio y NAS, además de apps para consolas y teles con Tizen y webOS, y un cliente web eficaz. Es el camino fácil si quieres instalar y olvidarte.
Jellyfin depende más del ecosistema abierto. El soporte existe, pero la calidad varía por plataforma, y algunos clientes específicos, como en Xbox o ciertos webOS, funcionan como webapps con limitaciones en 4K. En móviles, las apps oficiales tienden a usar la interfaz web; probar alternativas de terceros puede mejorar la experiencia.
Soporte: empresa frente a comunidad. En Plex, el soporte se canaliza por formularios y ayuda documental; la respuesta puede sentirse impersonal. En Jellyfin, la comunidad en Matrix, Discord o Telegram suele responder con rapidez, y desarrolladores y usuarios colaboran para resolver incidencias.
Casos de uso: cuál te conviene
Si quieres sencillez, estética y extras como TV gratis, catálogos online, funciones sociales y metadatos finos, Plex encaja como un guante. Asume que saltar intros, descargas offline o la transcodificación por hardware exigen Plex Pass.
Si priorizas cero costes, privacidad y control, y no te importa cacharrear un poco con apps y plugins, Jellyfin brilla. Es ideal si dependes de GPU para transcodificar en un NAS o mini PC y no quieres pagar por ello.
Para amantes de la música y el streaming agregado, Plex suele gustar más por su enfoque de todo en uno y su aplicación musical avanzada; para quienes solo desean ver su biblioteca sin ruido ni bloat, Jellyfin resulta más directo.
Consejos prácticos para decidir
Prueba ambos a la vez sin romper nada. Puedes ejecutar Plex y Jellyfin simultáneamente apuntando a la misma carpeta multimedia; Jellyfin permite guardar metadatos junto al contenido, de modo que un piloto en una carpeta pequeña no afectará a tu Plex.
Cuida la organización. Separa series y películas en directorios distintos y sigue el esquema que espera Jellyfin para mejorar el scraping. En Plex, aunque es algo más permisivo, también notarás beneficios con un orden claro.
Elige bien el cliente de TV. Si tu tele no soporta Android TV, plantéate un reproductor externo tipo Nvidia Shield para Jellyfin. En webOS, la app de Jellyfin actúa más como webUI y puede decepcionar; en Android TV funciona francamente bien.
Optimiza la transcodificación. En Plex, desactiva la transcodificación por software en equipos flojos, o contrata Plex Pass para usar hardware. En Jellyfin, habilita VA-API, NVENC o Quick Sync y maximiza el Direct Play para ahorrar recursos.
No todo es blanco o negro. Hay quien usa los dos: según el día y lo que vaya a ver, elige uno u otro. Con una sola carpeta bien montada, convivir con Plex y Jellyfin es perfectamente viable.
La elección depende del equilibrio entre comodidad y control. Plex es redondo si quieres una experiencia cerrada, pulida y con servicios añadidos; Jellyfin te da libertad absoluta, funciones clave sin pagar y un rendimiento muy digno, con el peaje de afinar más cosas tú mismo.