Windows 11 25H2 ya está disponible: novedades e instalación
Microsoft ha comenzado a liberar Windows 11 25H2 para los equipos compatibles. Se trata de un lanzamiento progresivo que llega primero a quienes activan la recepción temprana de actualizaciones, y que se ofrece como paquete de habilitación (eKB) sobre la 24H2 en la mayoría de los casos.
Esta edición no persigue grandes cambios estéticos ni funciones rompedoras, sino refuerzos internos de seguridad y estabilidad. Con el fin del soporte de Windows 10 el 14 de octubre de 2025, 25H2 se perfila como el paso natural para millones de PCs y un puente hacia las novedades que Microsoft irá habilitando de forma continua.
Cosas a tener en cuenta antes de actualizar
Si tu equipo ya ejecuta Windows 11 24H2, 25H2 llegará como actualización ligera: el eKB se descarga en segundos (tamaño mínimo) y no exige reinstalación completa. Ambas versiones comparten la misma rama y base de código, por lo que reciben idénticos parches de seguridad y correcciones.
Para quienes aún están en 23H2, el salto suele implicar una instalación completa del sistema. En algunos escenarios, puede ser necesario pasar antes por 24H2 y luego habilitar la 25H2, aunque Microsoft podría simplificar el proceso más adelante.
Recuerda que el despliegue es gradual: puede que no aparezca de inmediato en tu región o en tu hardware si hay bloqueos preventivos por controladores, periféricos o apps con conflictos.
La actualización es opcional en esta primera oleada, así que conviene revisar manualmente su disponibilidad en Configuración cuando quieras acelerar el proceso.
Si vienes de una instalación de 24H2 relativamente limpia y sin incidencias, el paquete de habilitación es la vía más rápida y cómoda para dar el salto.
Cómo instalar desde Windows Update
El camino sencillo pasa por Configuración > Windows Update. Activa la opción ‘Obtener las últimas actualizaciones en cuanto estén disponibles’ y pulsa en Buscar actualizaciones. Si tu equipo es elegible y no hay bloqueos, verás la oferta para instalar 25H2.
En equipos con 24H2, el mecanismo de paquete de habilitación aplica los cambios en pocos minutos y normalmente basta con un reinicio. No se requiere descargar una imagen completa ni realizar pasos complejos.
Si no aparece el ofrecimiento de inmediato, no es extraño: la distribución por fases prioriza ciertos modelos y configuraciones, y Microsoft activa retenciones temporales cuando detecta posibles incompatibilidades.
Cuando la oferta esté disponible, el asistente te guiará en un proceso prácticamente automatizado, sin perder archivos, programas ni configuraciones.
Quienes prefieran esperar pueden mantener 24H2 sin problema: ambas versiones comparten parches y mejoras de estabilidad mientras dura el despliegue.
Asistente de instalación y otras vías
El Asistente de instalación de Windows 11 es una alternativa útil si Windows Update no ofrece la actualización o si prefieres forzarla de forma controlada. Se descarga desde el sitio oficial de Microsoft y guía el proceso con pasos mínimos.
En la página de descarga, suele mostrarse un aviso del tipo ‘Windows 11, versión 25H2 está disponible’ con la opción de Iniciar la instalación. Al ejecutarlo, el asistente comprueba compatibilidad y continúa con la descarga e instalación.
Este método es recomendable cuando Windows Update presenta errores o si el equipo no muestra la oferta a pesar de cumplir los requisitos. Aun así, respeta posibles retenciones si hay conflictos conocidos.
Para entornos administrados, también se han publicado los paquetes de habilitación oficiales para arquitecturas x64 y Arm64, lo que facilita su despliegue a escala.
Adicionalmente, están disponibles las ISOs oficiales y la Herramienta de creación de medios para preparar unidades USB de instalación, con distintos idiomas y ediciones.
Instalar con la imagen ISO oficial
La ISO es la opción más flexible, pero implica una reinstalación del sistema en casi todos los casos cuando se viene de 23H2. Haz copia de seguridad, mantén el equipo conectado a Internet y descarga la imagen desde la web oficial de Microsoft.
Tras obtenerla, monta el archivo ISO con doble clic o desde el menú contextual (Montar), accede a la unidad virtual en ‘Este equipo’ y ejecuta setup.exe. Acepta que la app realice cambios y marca ‘Descargar actualizaciones, controladores y características opcionales (recomendado)’.
El asistente te permitirá conservar archivos y apps si se dan las condiciones, aunque en muchos casos desde 23H2 será más fiable una instalación limpia para evitar arrastrar incidencias.
Completa los pasos con ‘Siguiente’ y ‘Aceptar’, revisa las opciones de configuración y pulsa en Instalar para iniciar el proceso.
Si no ves todavía la instalación directa en Windows Update, recuerda que la disponibilidad depende del despliegue escalonado; la ISO es la vía para adelantarte con control.
Qué cambia realmente en 25H2
25H2 es una actualización de bajo impacto visual, centrada en seguridad, estabilidad y plataforma. Comparte base de código con 24H2 y habilita el mismo conjunto de parches, optimizaciones y correcciones.
Microsoft destaca avances en la detección de vulnerabilidades tanto en tiempo de compilación como en tiempo de ejecución, además de iniciativas de codificación segura asistida por IA orientadas a desarrolladores y empresas.
Se elimina el soporte a componentes heredados como PowerShell 2.0 y WMIC durante la instalación, para reducir superficie de ataque y cumplir con su ciclo de desarrollo seguro (SDL).
Para administradores, se añade la posibilidad de retirar apps preinstaladas de Microsoft Store mediante directivas de grupo o MDM en ediciones profesionales.
En el plano de conectividad, hay soporte para Wi‑Fi 7 en los equipos compatibles. Microsoft también prepara un menú Inicio revisado y mejoras de interfaz que llegarán con actualizaciones mensuales a 24H2 y 25H2.
Errores conocidos y bloqueos de compatibilidad
La compañía reconoce varios fallos conocidos en 25H2 que ya están bajo seguimiento. No parecen generalizados, pero conviene tenerlos presentes antes de actualizar.
- Reproducción de contenido protegido (DRM) con EVR: algunos usuarios no pueden ver películas o vídeo protegido por un error con Enhanced Video Renderer; Microsoft prevé un parche durante octubre de 2025.
- WUSA y archivos .msu: el instalador independiente de Windows Update puede impedir la instalación de paquetes .msu, algo que impacta sobre todo en entornos corporativos.
- Media Creation Tool en ARM64: la herramienta presenta errores al crear medios en dispositivos ARM64; en x86/x64 el problema no se reproduce.
- Incidencias heredadas de 24H2: al compartir núcleo, algunos problemas de la versión previa pueden manifestarse también en 25H2.
En presencia de controladores problemáticos, apps incompatibles o periféricos concretos, Microsoft aplica retenciones de seguridad que bloquean temporalmente la oferta de actualización hasta resolver el conflicto.
Si tu PC queda en retención, lo recomendable es esperar al parche correspondiente o usar la ISO con prudencia cuando el bloqueo se levante.
Disponibilidad, plazos y soporte
25H2 se está publicando ya en Windows Update para dispositivos elegibles con 24H2 que tengan activada la opción de recibir antes las últimas actualizaciones. El despliegue irá ampliándose por oleadas.
Aunque no introduce funciones de usuario final a gran escala, la versión reinicia el ciclo de vida de soporte: hasta 36 meses en Enterprise y Education, y 24 meses en Home y Pro.
Gracias a la base compartida con 24H2, Microsoft seguirá entregando nuevas características mediante paquetes mensuales de innovación continua para ambas ramas.
Si no te urge el cambio, puedes mantener 24H2 y actualizar cuando tu equipo reciba la oferta sin retenciones. No hay prisa si tu sistema funciona correctamente.
En empresas, conviene planificar el despliegue tras evaluar los fallos conocidos y verificar compatibilidades críticas (drivers, apps y hardware específico).
¿Actualización in situ o instalación limpia?
Para la mayoría, actualizar desde Windows Update es la vía más rápida y segura: mantiene archivos, programas y ajustes y apenas requiere intervención.
Si tu equipo arrastra lentitud, errores persistentes o malware, la instalación limpia con la ISO puede ser mejor opción, aunque exige copia de seguridad y más tiempo de preparación.
En cambios de hardware (nuevo SSD, placa base) suele ser recomendable instalar desde cero para sacar partido al rendimiento y evitar heredar problemas.
Quienes ya están en 24H2 y no sufren incidencias verán en 25H2 una transición muy ligera, con los beneficios de soporte renovado y el foco en seguridad sin alterar su día a día.
25H2 pone el acento en reforzar la plataforma y acelerar futuras mejoras: actualización ligera para 24H2, vías claras de instalación, ciclo de soporte renovado y un despliegue prudente con bloqueos donde toca; si necesitas dar el salto hoy, Windows Update y el Asistente serán tus mejores aliados, y si prefieres estabilidad, puedes esperar a que te llegue de forma natural.