Canonical rompe relaciones con socios y usuarios corporativos rusos
Canonical, la empresa detrás de Ubuntu se sumó hoy a las empresas que interrumpen sus negocios con Rusia a raíz de la invasión a Ucrania. Sigue así los pasos de Suse Linux y de Red Hat (IBM)
La información se publicó hoy en el blog de Ubuntu bajo el título «Estamos con Ucrania»
Canonical rompe relaciones con socios y usuarios corporativos rusos
En el post se lee:
En respuesta a la invasión rusa y los actos de guerra en Ucrania, Canonical envió un aviso de finalización del soporte, prestación de servicios profesionales y las asociaciones de distribución con empresas rusas. No reanudaremos tales compromisos mientras sigan vigentes sanciones amplias y democráticamente instituidas contra Rusia.
Sin embargo, no abandona a los usuarios domésticos
No restringiremos el acceso a los parches de seguridad para los usuarios de Ubuntu en Rusia: las plataformas de software libre como Ubuntu, las tecnologías VPN y Tor son importantes para aquellos que buscan noticias y diálogos fuera del control estatal. Dirigiremos cualquier ingreso de suscripción ruso para dicho mantenimiento a causas humanitarias de Ucrania.
También dejó en claro de que lado está la empresa.
Estamos apoyando activamente a todos nuestros colegas afectados por esta guerra para garantizar en la mayor medida posible su seguridad financiera, emocional y física. También apoyamos a colegas de todo el mundo que se han unido al esfuerzo para ayudar y albergar a víctimas y refugiados.
Como empresa y comunidad, estamos consternados por la pérdida sin sentido de vidas y la destrucción de bienes y patrimonio que se está produciendo en Ucrania.
Red Hat y SUSE Linux
La medida de Canonical llega casi un mes después que Red Hat (De la mano de su casa matriz IBM) tomara la decisión de cesar las ventas y los servicios en Rusia y Bielorrusia (país aliado), con efecto inmediato a partir del anuncio. El retiro del servicio se aplica a organizaciones ubicadas o con sede en Rusia o Bielorrusia. Desde la empresa dijeron también que de la misma forma está terminando las relaciones de asociación con organizaciones ubicadas o con domicilio legal en ambos países.
El presidente y director ejecutivo de Red Hat, Paul Cormier, condenó en una publicación del blog corporativo la invasión militar rusa de Ucrania y dijo que la compañía está unida con todos los afectados por la violencia.
Agregamos nuestras voces a las de aquellos que piden la paz y continuaremos trabajando para garantizar la seguridad de nuestros asociados afectados y sus familias de cualquier manera que podamos.
La empresa tiene asociados que viven y trabajan en Ucrania y Rusia.
Cournier explicó
Hemos ayudado a miembros de Red Hat en Ucrania y sus familias (incluidos cónyuges, hijos y miembros de la familia) a mudarse de manera segura a países cercanos y continuamos ayudando a quienes permanecen en el país de cualquier manera posible
También estamos apoyando a nuestros asociados en Rusia.
Melissa Di Donato, la directora ejecutiva de SUSE aseguró que su firma está haciendo todo lo posible para apoyar a los empleados que tienen familiares en Ucrania y que todos los empleados y sus hogares tienen acceso a SUSEAssist, su programa de apoyo al personal.
Con respecto al tema comercial, aclaró:
Junto a estos esfuerzos, estamos observando todas las sanciones económicas. De acuerdo con estas sanciones, estamos evaluando todas nuestras relaciones comerciales en Rusia y hemos suspendido todas las ventas directas en Rusia. También estamos preparados para cumplir con las sanciones adicionales que puedan implementarse.
Según algunos medios, Oracle continúa brindando servicios a ambos países, aunque no hay confirmación oficial.
Hay que recordar que las licencias originales de software libre y de código abierto impiden poner cualquier tipo de restricciones al uso y la distribución del código por lo que nada impide que las empresas rusas usen Fedora, CentOS y openSUSE y que organizaciones locales reemplacen a las extranjeras.
Y, si con esto no alcanza, el gobierno ruso analiza legalizar el uso de software sin tener licencia.