Con la llegada de GPT-4o, «ChatGPT» ha pasado a ser «ShortInfoGPT». El problema de las limitaciones junto a no poder elegir otro modelo
Antes de la presentación de GPT-4o, el CEO de OpenAI publicó un post en X con sólo 3 letras: Her. Cuando la presentación ya tuvo lugar entendimos qué quería decir: su popular ChatGPT era capaz de mantener conversaciones fluidas como la Samantha de la película protagonizada por Joaquin Phoenix y Scarlett Johannson. Dejando el miedo de lado, muchos pensamos que estaba muy bien y que pronto podríamos hablar como en aquel largometraje, pero va a ser que no. Por lo menos si no se paga la suscripción.
Lo peor de todo esto no es eso. Además, es lógico, que tan potente herramienta sólo se pueda usar si se paga. Lo malo es que ChatGPT, aquel chatbot con el que podíamos mantener conversaciones relativamente largas, ya no existe. Actualmente sólo podemos usar ChatGPT con el modelo GPT-4o, y con muy pocos mensajes si no pagamos. Tras varias consultas, el modelo pasará a ser el anterior GPT3.5, lo que puede ser un problema.
Qué es lo malo del nuevo ChatGPT
El problema es claro: empiezas un chat, y como no te permiten elegir GPT3.5, se abre con GPT-4o. Tras unos mensajes, el chat te impide seguir, te recomienda abrir uno nuevo y, ahora sí, con GTP3.5. Las intenciones también están claras: crearnos necesidad y que pasemos a pagar para eliminar los límites.
Si pensaran más en las personas, harían algo muy simple: permitirnos usar GPT3.5 para realizar consultas que requerirán más interaccinoes y GPT-4o cuando quisiéramos, por ejemplo, que las respuestas estuvieran actualizadas. El modelo más nuevo puede buscar en Internet, y yo me he encontrado con alguna respuesta incorrecta por no estar actualizada, le he dicho que se equivocaba y que buscara en Internet, lo ha hecho y ya he ha ofrecido la respuesta correcta.
Pero claro, las compañías se crean para ganar dinero. Por lo menos la mayoría.
El problema de no poder elegir
No poder elegir hace que desperdiciemos GPT-4o cuando no es necesario. Por lo tanto, aquí va una recomendación que no le gustará a OpenAI: usad menos ChatGPT en su versión oficial y más en alternativas como DuckDuckGo AI Chat. Lo que ofrece la compañía del pato es GPT3.5 sin registro, y aunque también tiene límites, al usarlo no desperdiciaremos nada de GPT-4o.
Además, que no requiera registro también permite saltarse los límites con más facilidad. El problema de que se corte una conversación también estará ahí, pero si no necesitamos que la conversación siga un hilo, podemos eliminar la cookie desde las herramientas del desarrollador o abrir otro chat en una ventana de incógnito y podremos seguir usándolo.
En cualquier caso, ChatGPT ya no es un chat si no se paga. Es un poco como Microsoft Copilot y merece la pena tenerlo en cuenta. Eso y las alternativas disponibles.