De vuelta a la realidad: la cuota de mercado de Linux cae por tercer mes consecutivo
Hace mucho tiempo que a principios de cada año se escucha algo así como que este será el año de Linux en el escritorio. Y no, nunca se ha cumplido. Pero a principios de 2020, por marzo, empezamos a ver algo extraño: la cuota de mercado de Linux llegó a duplicarse, o incluso ir más allá. Aunque la experiencia nos había enseñado a mantenernos escépticos, sí que nos llevamos la impresión de que algo estaba cambiando… hasta llegar a septiembre.
Según datos obtenidos por Net Marketshare, Linux ha caído del 2.69% de cuota de mercado al 1.47% en menos de un mes. Estos usuarios han ido a parar a Windows y macOS, los sistemas de Microsoft, el que se encuentra instalado por defecto en la mayoría de PCs, y de Apple, que sólo se puede usar de manera oficial en sus Mac. Viendo esta caída, o más concretamente comparándola con la subida y cuándo se produjo ésta, tenemos que preguntarnos: ¿qué ha pasado?
La explicación: Linux podría usarse más en casa
Como hemos explicado, para imaginar qué ha pasado en los últimos meses tenemos que observar cuándo se produjeron los primeros cambios. El aumento o el «superboom» tuvo lugar de marzo a abril, justo cuando se nos confinó a prácticamente todo el mundo por la pandemia del coronavirus. Eso podría significar que hay muchos usuarios que prefieren usar Linux cuando están en sus casas con sus ordenadores, pero que en sus oficinas usan Windows.
Pero lo más sorprendente lo vemos si añadimos reglas a los análisis. Y es que por ejemplo Fedora ha mantenido su cuota de mercado durante los últimos meses, pero Ubuntu ha subido y ha bajado. De hecho, parece que el responsable de todas estas variaciones es el sistema operativo desarrollado por Canonical, que no tenemos que olvidar que está disponible en su versión principal y 7 sabores oficiales.
En cualquier caso, la cuota de mercado de Linux sigue, o vuelve a estar, por debajo del 2%, lo que está lejos del 10% de macOS y el casi 90% de Windows. Aunque se espera que en 2017 subamos hasta el 20%, yo seguiré manteniéndome escéptico.