El por qué de mi «obsesión» con las aplicaciones web
Es probable que alguno de nuestros lectores piense «¿otra vez?» cuando lee un nuevo artículo mío sobre las aplicaciones web. Soy perfectamente consciente de que he escrito varios, muchos diría yo, pero existe un motivo. Si se usa el buscador de Linux Adictos «aplicaciones web» o «webapps» veréis a lo que me refiero, pero esta «fijación» u «obsesión» no es nueva para mí.
Todo empezó, diría yo, en 2016. Yo escribía para un blog de esta red con temática de Apple, y por aquel entonces mi ordenador principal era un iMac. En lo que en aquel momento era Mac OS X -ahora macOS- había aplicaciones para todo, y yo usaba Tweetbot para Twitter. Aunque intenté que mi espacio de trabajo me resultara cómodo, no lo conseguí en la parte mental, por lo que compré un portátil al que le puse Linux.
Linux no tiene tanto software, y ahí entran las aplicaciones web
¿Cómo podemos usar Twitter desde Linux? Pues en Ubunlog escribí sobre twinux, lo que era justo lo que se explica en nuestro artículo sobre las SSB. También probé Cawbird, pero ni se acerca a lo que me ofrecía Tweetbot (ahora muerto por la gestión Musk). Antes de eso también había pasado por Franz (y Ferdi), pero nada me satisfizo. Y la cuestión es que la diferencia de Linux con Windows y macOS es enorme, por lo menos en cuanto a software de servicios oficiales. Y es es el quid de la cuestión.
Si vamos a la web de Spotify, al apartado de Linux, veremos que hay un cliente «oficial», pero lo crean trabajadores de la compañía que quieren escuchar su música en sus aparatos con Linux. No es algo que haga Spotify directamente. «Y qué diferencia hay«, pensará alguno, y hay una muy importante: la versión para Linux está basada en la web, y no permite descargar música. Que sí, que existe Spotube, pero no es lo mismo. ¿Y WhatsApp? ¿Qué pasa con las llamadas y videollamadas desde Linux? Yo no veo los botones por ningún lado…
Windows y macOS tienen aplicaciones nativas
Eso no pasa en Windows y macOS. macOS, desde que es compatible con aplicaciones para iPad, puede usar, por poner algunos ejemplos, las aplicaciones de Netflix, Prime o Movistar+, y Windows ofrece prácticamente lo mismo en su Microsoft Store. Nosotros tenemos que confiar en otras cosas, como Kodi o, de lo que va este y otros muchos artículos míos, en las aplicaciones web.
El por qué nos cuidan menos puede tener diferentes explicaciones, siendo una de ellas la cuota de mercado. En un momento histórico para nosotros, este año hemos rozado el 4% en el escritorio, lo que sigue lejos del 16% de macOS si no unimos fuerzas con chromeOS. Y ni así.
Esto es algo que dijo el CEO de Epic al ser preguntado sobre si el éxito de la Steam Deck podría causar que Fornite llegara a Linux. Su respuesta fue que no era suficiente, y que deberían vender al menos 10 millones para que se lo plantearan.
Los otros motivos
Hay otros motivos por los que los desarrolladores no quieren traer su software a Linux, y guarda relación con lo fácil que es, en teoría, hackear las cosas. Los desarrolladores de videojuegos tienen miedo de que los usuarios de Linux usen herramientas para poder hacer trampas (cheats), y eso, unido a que somos pocos, hace que la decisión sea fácil.
Otra razón puede ser similar a la que hace que muchos desarrolladores cuiden más a los usuarios de iOS que a los de Android. Los del ecosistema de Apple, aunque son menos, están más dispuestos a pagar que los del de Google. Los usuarios de Linux estamos más acostumbrados a usar software de código abierto, y eso de pagar no es lo más habitual. Eso no explicaría por qué no hay aplicaciones nativas de Twitter o Facebook, que son gratuitas, pero puede contar.
Por lo menos tenemos aplicaciones web
En resumen, y aunque no sea lo mismo, mi «obsesión» con las aplicaciones web, que viene de lejos, la tengo porque los usuarios de Linux no tenemos muchas más opciones. Cuando lo mejor a lo que podemos acceder está disponible en una página web, terminamos yendo a ella. Y no siempre es lo mejor usarlas en un navegador completo. Por lo menos tenemos aplicaciones web.
Imagen: montaje a partir de esta extensión para Chrome.