En sistemas operativos Windows está todo. Ese es el único argumento que yo daría como positivo para defender al sistema de Microsoft: está todo y, además, en muchas opciones diferentes. Los usuarios de Linux, y a veces los de macOS, tenemos que usar lo que encontremos o haya disponible, lo que no siempre es malo, pero también suele significar que no tenemos algunas aplicaciones oficiales. Eso pasa en Linux con la app de Evernote, pero esto podría cambiar pronto.

Así lo ha publicado Ian Small, CEO de Evernote, en una entrada en su blog publicada hace unas horas. Ian insinuó el desarrollo continuo de un cliente de escritorio oficial para SO basado en Linux, mencionando que el equipo está trabajando en la reestructuración y la migración de datos en la nube a gran velocidad. Que vaya a haber versión para Linux no es información oficial, pero lo contrario sería una sorpresa desagradable.

¿Evernote en Linux? Podría ser una realidad en 2020

En diciembre, lanzamos una versión completamente rediseñada de nuestra experiencia web moderna a un pequeño grupo de clientes. Y, según lo planeado, no se dieron cuenta. En el exterior, esta versión es casi indistinguible de lo que muchos de nosotros ya usamos en el día a día. Pero por dentro, su base de código se ha renovado sustancialmente en la parte superior de una nueva biblioteca de códigos que gobierna la comunicación entre el cliente y la nube.

Sin datos más concretos, aún hay varias dudas: no se puede saber si Evernote para Linux llegará como una versión Electron del cliente web rediseñada o una aplicación totalmente nueva y nativa. Probablemente, Small o alguien de su equipo nos den más detalles en un futuro cercano.

Ahora mismo, si queremos usar Evernote en Linux tenemos opciones no oficiales, como entrar desde el navegador o un cliente en un paquete Snap que podemos ver en este enlace. En cuanto al navegador, también existen extensiones, ni la de Firefox ni la de Chrome son opciones oficiales. Una opción oficial mejoraría el soporte y, si crean una app nativa, el funcionamiento sería el mejor que podríamos desear.