Hay una gran cantidad de aplicaciones web convertidas en apps para Linux, y eso no está mal (del todo)
En los últimos días, Flathub ha dado varios pasos importantes para convertirse en una de las mejores opciones para instalar aplicaciones para los usuarios de Linux. Se van a desmarcar de GNOME y van a convertirse en un proyecto propio, y todos estos cambios se verán reflejados también en cómo nos presentan las cosas. Por ejemplo, el icono será diferente, y ya están preparando una web que actualmente está en fase beta. Fue cuando estuve dándome un paseo por la futura versión cuando me di cuenta de que había una «gran» (véanse las comillas) cantidad de aplicaciones web convertidas en aplicaciones de escritorio.
¿Por qué hay tantas aplicaciones web hechas aplicaciones para Linux? La verdad es que no tengo una respuesta segura, pero la captura de cabecera puede ayudarnos a hacernos una idea: hay software que sencillamente no está para Linux, pero sí podemos acceder al servicio web. WhatsApp es el mejor ejemplo para entender esto: lo que no se entiende es por qué no hay app nativa para Linux, pero sí vemos que hay hasta 5 versiones distintas en Flathub, a lo que se le suman Franz y Tangram, que son aplicaciones para gestionar varias aplicaciones web. ¿Y que ofrecen? Pues las cuatro de verde son básicamente el mismo WhatsApp web que ofrece WhatsApp Inc., mientras que Youp es lo mismo, pero con un modo a pantalla completa real, no parcial.
Las aplicaciones web de escritorio separan el contenido
En Snapcraft también encontramos software así. Me parece recordar que antes había una aplicación «de escritorio» de Microsoft Office, que era realidad era la versión web hecha app. Sigue existiendo Apple Music, y son eso, la misma web pero hecha aplicación de escritorio. ¿Tiene todo esto sentido? En mi opinión, sí y no.
Hay muchos usuarios que no quieren usar paquetes flatpak ni snap, que es en el formato en el que aparecen muchas de estas aplicaciones, por lo que usar un paquete de este tipo sólo para una aplicación que se puede ejecutar en el navegador no parece tener mucho sentido. Pero sí lo tiene. Aunque el navegador que usemos por defecto nos permita instalar las aplicaciones o crear accesos directos que se ejecuten independientemente del navegador, lo que están haciendo en realidad es abrir una ventana nueva sin campo de URL ni pestañas, pero es el mismo navegador.
Hemos puesto como uno de los ejemplos una aplicación para escuchar música. Si nos creamos un acceso directo de Chrome/Brave/Vivaldi y silenciamos la «aplicación» de música de turno, también nos silenciará el resto de ventanas y pestañas del navegador que nos ha instalado la app. Es probable que no sea esto lo que queremos, y en donde cobra un poco de sentido tener aplicaciones de escritorio hechas a partir de una página web, usen Electron o cualquier otra tecnología.
Además, si usamos WhatsApp web, las notificaciones nativas de un escritorio Linux no siempre saben dónde llevarnos cuando les hacemos clic. En ocasiones ni siquiera se ve el logotipo del servicio, mostrándonos el logotipo del navegador. Eso sí, el nombre de la pestaña sí lo suelen mostrar, y el mensaje recibido también.
Si es posible, mejor aplicaciones reales
Ahora bien, si es posible, siempre es mejor que creen aplicaciones reales. Entre los ejemplos que podemos mencionar estaba Apple Music Electron, y esa aplicación evolucionó hasta convertirse en Cider, un ejemplo de cosas bien hechas. Sus desarrolladores y colaboradores, que son muchos, crearon una app de Apple Music que supera por mucho al iTunes que actualmente sigue siendo la opción oficial para Windows. Y lo mejor es que también funciona en Linux, lo que demuestra de que en ocasiones, cuando hay una API disponible, se puede hacer mucho y muy bien.
Lo malo es algo bien sabido, y es que a los usuarios de Linux no se nos cuida tanto como a los de Windows, y casos como el de Cider no hay muchos. Lo bueno es que hay mucho software de código abierto que nos permite hacer de todo, o casi, porque si pudiéramos hacer de todo no habría tantos proyectos en los que se llevan aplicaciones web al escritorio de Linux. Mientras sea para ofrecer alternativas, y no abandonen el proyecto, bienvenidas sean.