KDE Plasma 6: el entorno de escritorio da el salto a Qt6 y Wayland con su nueva versión mayor
La espera ha terminado: Plasma 6.0 ya está aquí como la primera versión estable de la nueva versión mayor del escritorio, valga la redundancia, y es que el salto que da el entorno de escritorio, aplicaciones y tecnologías de KDE obliga a matizar, aunque en un primer vistazo no lo parezca.
Ha pasado casi una década desde que debutó Plasma 5 y, tal y como lo hace ahora Plasma 6, no lo hizo con el aspecto por el que será recordado. Por el contrario, este lanzamiento que hoy ve la luz podría pasar perfectamente por una continuación al uso de KDE Plasma 5.27 por lo que a novedades visuales y prácticas se refiere. Pero no es así, claro.
KDE Plasma 6, englobando en este término al escritorio (Plasma), las bibliotecas (Frameworks) y las aplicaciones (Gear), se erige sobre dos pilares fundamentales: Qt6 y Wayland, o la nueva versión de la biblioteca gráfica y el nuevo protocolo gráfico del escritorio Linux, respectivamente. Por lo demás, e incluso metiendo en la coctelera todas las novedades en su conjunto, la sensación de cambio es mínima.
«Hemos hecho todo lo posible para asegurar que estos cambios sean lo más fluidos e imperceptibles posible para el usuario, por lo que, cuando instale esta actualización, verá el mismo entorno de escritorio familiar que conoce y ama», indican en este sentido en el texto de presentación de la nueva versión. Por si acaso, eso sí, se mantendrá el soporte de X11, para quien lo prefiera o lo necesite.
Así pues, el grueso de las novedades de KDE Plasma 6 se encuentran bajó el capó, prácticamente inapreciables para el usuario que esté usando o conozca la versión anterior del entorno. ¿Y esto es bueno o malo? Dependerá, como siempre, de lo que esperase cada uno. ¿Es mejor un cambio radical con novedades notables, o uno suave y estable sobre el que ir desplegando poco a poco los cambios?
Lo que sí os podemos adelantar es que si distribuciones como KaOS ni siquiera se esperaron a que apareciese la versión final de Plasma 6 para reemplazar a Plasma 5, arguyendo que la nueva versión está «lista para brindar una mejor experiencia de usuario que Plasma 5», es por algo. O, dicho de otra manera, esta vez la transición no está teniendo nada que ver con la vivida en los tiempos pretérito del proyecto. Pero ya habrá tiempo para opinar.
KDE Plasma 6, novedades
Centrémonos ahora en las novedades que trae este lanzamiento, alguna de las cuales no sería posible sin el mencionado salto tecnológico. Por ejemplo, el soporte primigenio de HDR. Así lo describen en el anuncio:
Plasma en Wayland ya tiene compatibilidad parcial con alto rango dinámico (HDR). Esto proporciona colores más ricos y profundos para juegos, vídeos y creaciones visuales en monitores y software compatibles. Puede definir un perfil ICC para cada pantalla de forma individual para que Plasma ajuste los colores como corresponda. Las aplicaciones siguen estando limitadas al espacio de color sRGB, aunque estamos trabajando para aumentar en breve el número de espacios de color permitidos. Para mejorar la accesibilidad de Plasma, hemos añadido compatibilidad para filtros de corrección de daltonismo. Esto ayuda cuando se padece protanopia, deuteranopia o tritanopia.
Entrando en materia, lo primero que llama la vista del escritorio en Plasma 6 es el nuevo panel flotante de Plasma 6, muy similar al previo (el rollo flotante viene de unas versiones atrás) pero con el concepto bien pulido: mejora su capacidad de personalización, permitiendo por ejemplo su configuración cual dock y aunque no alcanza el nivel de aplicaciones como Latte Dock, va sobrado para una mayoría de usuarios.
Las opciones de anchura, estilo y visibilidad marcan la diferencia en el aspecto práctico, mientras que la afinidad «flotable» de los widgets lo hacen en el estético. Una deuda que Plasma 5 no llegó a saldar, pero que ya no atormentará a los sibaritas del perfeccionismo.
Por defecto el panel se muestra al estilo tradicional, como en Plasma 5, con el pequeño toque de verse en modo flotante, excepto cuando se maximiza una ventana, que se pone automáticamente. Sin duda, uno de los cambios más atractivos de Plasma 6 al que habrá que echarle un vistazo en profundidad con más calma. Pero este, que cierto es que podría haberse dado en Plasma 5, no es un cambio menor.
Otras novedades de estilo de Plasma 6 incluyen el nuevo fondo de escritorio predeterminado, en versiones para los temas claro y oscuro; lo mismo para con el refresco de Brisa (Breeze), el tema visual de las aplicaciones, si bien la diferencia es justita (se supone que dejarán el rediseño visual para más adelante); se ha renovado también el tema de sonido con Océano (Ocean), que sustituye al viejo Oxígeno (Oxygen; y ojo, que también se ha adaptado el tema de iconos Oxygen, aunque se ha dejado como alternativa)…
A nivel práctico Plasma 6 introduce dos nuevos efectos de escritorio: la «combinación los efectos de Vista general y Cuadrícula de escritorios en uno», algo que os traduzco más fácilmente señalando la vista de actividades de GNOME, porque es casi lo mismo. De hecho, ya se había mediointegrado en Plasma 5, pero ahora es la opción de «exposición» por defecto, con el añadido de la navegación por los escritorio virtuales, claro está.
Otro efecto de nueva generación que no va a pasar desapercibido, a pesar de que está desactivado de manera predeterminada, es el cubo. Sí, el viejo cubo con el que navegar en tres dimensiones por los escritorios virtuales, emblema antaño de los efectos del escritorio Linux (¿quién se acuerda de Compiz?). Pues bien, Plasma 6 lo trae de vuelta.
Plasma 6 modifica asimismo valores predeterminados a los que ya nos tenía acostumbrados el escritorio. Los más destacados son:
- Wayland es la sesión gráfica predeterminada.
- Los paneles flotan de forma predeterminada.
- Los archivos y las carpetas se seleccionan ahora con un solo clic y se abren con un doble clic
- La «Cuadrícula de miniaturas» es el nuevo estilo predeterminado del selector de tareas
- Al desplazarse por el escritorio ya no se cambia a otro escritorio virtual
¿Hay algo que no te convenza? Sin problemas: esto sigue siendo KDE y lo puedes dejar todo a tu gusto.
Y el lugar donde hacerlo (dejarlo todo a tu gusto) es, más allá de las preferencias de cada aplicación, las Preferencias del sistema, otro de los componentes que te encontrarás cambiado en KDE Plasma 6. Dicen que las han mejorado «para que resulte más amigable y tenga menos páginas anidadas», lo cual es bueno. Claro que tendrás que dedicarle un poco más de atención, porque está igual… lo cual no es tan bueno.
Por último, destacan en las notas oficiales las mejoras en la búsqueda de Plasma (a través de KRunner), que ahora permite personalizar el orden de los resultados, así como añade alguna opción más y gana en rendimiento: «más de un 200% más rápida al buscar en los documentos recientes, hasta un 60% más rápida al buscar aplicaciones; y hasta un 30% menos de ciclos de CPU». No está nada mal.
¿Ya está? ¿No hay nada más en Plasma 6? Lo cierto es que sí, hay mucho más. Como en cualquier otro lanzamiento de Plasma, son muchas las pequeñas novedades que se quedan sin comentarios (por ejemplo, la renovación de widgets, la eliminación de frames innecesarios en los widgets de las aplicaciones) y de los que te darás cuenta conforme uses el escritorio.
Pero sí, hay más, mucho más, al margen de Plasma 6.0 , pero dentro de KDE Plasma 6. El anuncio oficial habla y da repaso a Plasma Mobile 6, la edición para dispositivos móviles; y sobre todo, ahí está KDE Gear 24.02, la nueva versión de las aplicaciones del proyecto KDE entre las que se incluyen básicas como el gestor de archivos Dolphin, la utilidad de captura Spectacle o el editor de texto avanzado Kate, pero también otras tantas, todas ellas con novedades en su haber.
Sin embargo, este artículo ya es bastante largo como seguir con ello y en los próximos días seguiremos hablando de KDE Plasma 6, así que lo dejamos aquí. No te pierdas el anuncio oficial de KDE Plasma 6, donde se detallan todo lo expuesto con mayor profundidad.
¿Te apetece probarlo? Como hemos apuntado más arriba, hay distribuciones como KaoS que ya lo sirven por defecto y KDE neon, máximo exponente en su categoría, ya ofrece imágenes de instalación actualizadas de su versión estable (User Edition) con KDE Plasma 6. Con todo, orden y buena letra, que las prisas son malas compañeras y por más que todo se haya hecho lo mejor posible, siempre hay posibilidad de tropiezo.
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