Comenzamos publicando ayer los resultados de nuestra encuesta de fin de año con los navegadores web más populares de 2020 y continuamos hoy con los escritorios, uno de los grandes focos de diversidad en GNU/Linux y uno de los más apreciados por los usuarios, que entre tanta oferta pueden encontrar aquel que mejor se adapta a sus gustos y necesidades.

Dicho lo cual, ya lo advertía en el anterior artículo, por más opciones que haya son dos las que se suelen disputar al grueso de los usuarios porque son las más veterana y las más potentes… Y tampoco hay sorpresas en este sentido. De hecho, aunque en principio debería haber más competencia, es la encuesta cuyos resultados menos varían de un año a otro.

Vemos cómo ha quedado la tabla (número de votos y porcentajes entre paréntesis) y cómo ha cambiado el panorama de un año a otro.

Escritorios 2020

Votos: 4.022

• KDE Plasma (1.310 – 32,5%)
• GNOME (1.015 – 25,2%)
• Cinnamon (495 – 12,3%)
• Xfce (464 – 11,5%)
• MATE (211 – 5,2%)
• Deepin (162 – 4%)
• Otro (124 – 3%)
• Pantheon (109 – 2,7%)
• Budgie (72 – 1,7%)
• LXQt (60 – 1,4%)

KDE Plasma. Toca repetirse, y es que por cuarto año consecutivo, KDE Plasma es elegido por una mayoría como el escritorio más popular, aumentando además su cuota con respecto al año pasado en casi tres puntos. ¿Cómo lo ha logrado? Con años de mejora sin pausa y, particularmente en 2020, con tres excelentes lanzamientos. Tiene mucho mérito que sea la comunidad la que lo ensalce, habida cuenta de que, salvo alguna excepción, las grandes distribuciones lo relegan a sus ediciones secundarias.

GNOME. El segundo en liza es, como no podía ser de otra manera, GNOME, que también aumenta su margen ligeramente desde el año pasado en una proporción similar. Es la opción del establishment de Linux que diría aquel, pero su progresión ha sido igualmente notable en los últimos años y especialmente en 2020, en el que ha lanzado sus dos versiones más pulidas hasta la fecha.

Cinnamon. El escritorio de Linux Mint -y cada día el de más distros- se alza con la tercera posición, perdida el año pasado en favor de Xfce, aunque no consigue remontar del todo en porcentaje. No obstante, no parece que haya dudades de que se ha asentado como la gran alternativa a los dos principales.

Xfce. Xfce cae del tercer al curto puesto, pero lo que destaca en su caso es la pérdida de casi tres puntos de margen, precisamente en un periodo en el que el proyecto ha acelerado su desarrollo considerablemente. Sea como fuere, sigue siendo una de las alternativas preferidas por el usuario.

MATE. En la misma posición del año pasado se encuentra la extensión de lo que fue GNOME 2, una alternativa sólida por una lado, pero un tanto desfasada por el otro que cae un poco con respecto a 2019.

Deepin. Sin cambios, el escritorio más resultón del ecosistema Linux mantiene el lugar que consiguió el año pasado, a pesar de que su margen también decrece un poco.

Otro. Y llegamos a la opción de libre designación, que de nuevo es imposible valorar porque los comentarios que especifican qué otro no cubren ni de lejos los votos recibidos. Lo dejamos así, me temo.

Pantheon. Sin cambios con respecto al año pasado, el escritorio de elementary OS, disponible también en otras distribuciones, es el siguiente de la lista… y es un poco extraño que no esté más arriba, la verdad.

Budgie. El segundo y último adelantamiento de la encuesta de este año lo protagoniza Budgie, cuyo margen apenas se mueve y cuyo desarrollo está bastante estancado, pero así lo habéis votado.

LXQt. En último lugar tenemos a la renovación del clásico LXDE al que muchos usuarios siguen echando de menos, porque LXQt aún no ha conseguido ofrecer el mismo nivel de ligereza, estabilidad y características.

Y esto es todo. KDE Plasma y GNOME se mantienen un año más como las dos grandes opciones del escritorio Linux, con Cinnamon y Xfce como alternativas confiables. El lugar de MATE en el mundo no está claro y el de Deepin y Pantheon habrá que verlo, porque si hay algo evidente es que el usuario de Linux no está por la labor de prescindir de la funcionalidad en favor de la estética… pero todo cambia. En resumidas cuentas, digamos que no nos podemos quejar de lo que tenemos a nuestra disposición. ¿Cómo lo veis?