La novela de Munich y el código abierto suma un nuevo capítulo
En lo que va del siglo XXI, la ciudad alemana de Munich ha sido primero una victoria y después de una derrota para los defensores del código abierto.En el 2003, la ciudad decidió migrar de WindowsNT a soluciones de código abierto. Como parte de esas acciones se convirtió en miembro de The Document Foundation y desarrolló su propia distribución Linux (LiMux) Pero, en el 2017 volvió a los brazos de Microsoft.
La decisión de abandonar al código abierto tuvo que ver con la elección como alcalde de un señor llamado Dieter Reiter quien antes de dedicarse a la política fue el que convenció a Microsoft de instalarse en Munich. Uno de los vecinos de edificio de Microsoft era la consultora Accenture. ¿Adivinen cuál fue la consultora que eligió Reiter para determinar si usar código abierto era o no una buena idea?. Accenture y Microsoft eran socios desde años.
La novela de Munich. Escenas de los próximos capitulos
Cuando sea tecnológica y financieramente posible, la ciudad hará hincapié en los estándares abiertos y en los programas informáticos gratuitos con licencia de código abierto.
Nos adheriremos al principio de ‘dinero público, código público’. Eso significa que mientras no haya datos confidenciales o personales involucrados, el código fuente del software de la ciudad también se hará público
Los párrafos de arriba son parte del acuerdo de la nueva coalición gobernante que estará en el poder hasta el 2026. Esta nueva coalición la integran los ecologistas y socialdemócratas.
Aunque desde la comunidad del código abierto festejaron la decisión, desde la Free Software Foundation Europa (nada que ver con la de Stallman) fueron más cautos en su análisis. Quién hablo fue Alex Sander, gerente de políticas públicas para la UE
Estamos muy contentos de que estén asumiendo los puntos de la campaña ‘Dinero público, código público’ que comenzamos hace dos años y medio. Pero también es importante señalar que esto es sólo una declaración en un acuerdo de coalición que esboza los planes futuros.
Se puede esperar que cualquier transición paso a paso de este tipo lleve años. Pero también es posible que Munich sea capaz de moverse más rápido que la mayoría porque no están empezando de cero. Se puede asumir que algunos programas de LiMux todavía estén en uso y que parte del personal esté familiarizado con su uso.
Como suele suceder en estos casos, la opinión está dividida. El punto de vista imparcial lo trae Basanta Thapa, experto en gobierno digital del Instituto Fraunhofer de Sistemas de Comunicación Abiertos de Berlín:
Los criterios para la toma de este tipo de decisiones nunca son puramente técnicos yeso no es necesariamente algo malo.
En términos técnicos, ninguno de los dos sistemas es necesariamente mejor que el otro cuando se trata del uso cotidiano.
Thapa señala cuales son los criterios que se tienen que tener en cuenta:
Por lo general, hay dos puntos de fricción principales: la aceptación del usuario, que implica la formación de las personas en los nuevos sistemas, y la interfaz entre el software abierto y el cerrado. Eso puede ser cualquier cosa, desde conseguir que un documento de LibreOffice se lea en otro programa, hasta software que los ayuntamientos han escrito especialmente para, por ejemplo, registros escolares, contratos de licitación o recogida de basura.
El experto recomienda tener en cuenta los costos de romper los contratos actuales y los posibles ahorros a largo plazo del cambio.
Hay que tener en cuenta que el 2020 no es el 2003. El contexto político es otro y a nivel países y Union Europea se le empieza a dar más importancia al concepto de soberanía digital.
Varias ciudades y municipios alemanes más pequeños, por ejemplo Leonberg en el estado de Baden-Württemberg y Treuchtlingen en Baviera ya migraron sus equipos al código abierto. Incluso desde el gobierno central comienzan a interesarse en el tema.
El Ministerio Federal del Interior encargó a la consultora PwC que investigara cómo Alemania podría lograr más soberanía digital y ser menos dependiente de proveedores como Microsoft.
Una de las recomendaciones del estudio de agosto de 2019 fue que había que invertir en más software de código abierto dado que esta opción podría llevar a una independencia permanente de los principales proveedores.
Por ahora son solo buenas intenciones. No se pierdan los próximos capítulos para ver como termina esta apasionante historia.