Las estafas por Internet están aumentando. Cómo evitar caer en la trampa
Los intentos de estafas siempre han estado entre nosotros, pero creo que nunca al nivel actual. Desde hace tiempo, yo, como supongo muchos de vosotros, he estado recibiendo mensajes por cualquier vía, siempre lanzando un anzuelo para ver si pico. Pero no, no lo muerdo ni lo morderé, y si escribo este artículo es, en parte, para denunciar estas prácticas y para que ninguno de nuestros lectores caiga en trampas como estas.
La mayoría de las estafas nos llegan en forma de mensaje de texto, bien sea por SMS o por alguna aplicación como WhatsApp o Telegram, correo electrónico o algo similar. Son tentadoras, pero son eso, intentos de estafa que se deben quedar ahí. Lo que viene son algunas de las que me han intentado colar a mí, y aunque eliminaré información sensible, espero que ningún estafador se sienta ofendido si lee esto. Bueno, me da igual.
Estafas en la red
La hermana tímida
Hoy mismo he recibido este mensaje:
«Estoy ayudando a mi hermana a encontrar un amigo amable, honesto y cálido. Mi hermana es muy amable, pero un poco tímida, así que se me ocurrió este método. Espero que no te importe. Primero, conózcanse. Esta es mi hermana WhatsApp: +346xxxxxxxx (sea amable y educado)«.
El remitente del SMS era de un servicio de correo de 126.com, y eso fue suficiente para saber que había algo raro. Ojo, que yo no habría respondido ni aunque pusiera gmail.com o algo más conocido, pero un dominio extraño no ayuda. El teléfono sí es un móvil de España, pero 126.com no.
Si esto no era una estafa, lo siento, chica.
El banco… del que no soy cliente
La estafa que creo que está más extendida por Internet debe ser el correo del banco. No tengo pruebas, pero tampoco dudas. Lo que hacen es enviar un correo que se supone que viene de nuestro banco, diciendo que hay algún problema que debemos solucionar lo más pronto posible. Si entramos al enlace que nos pasan, solemos ver una página muy bien diseñada con sólo unos pocos fallos. Uno de ellos es la URL, que no se parece en nada a la de un banco real, y en la mayoría de casos hay hasta faltas de ortografía, aunque a veces se lo trabajan un poco más. Su intención es que pongamos nuestro usuario y contraseña, momento en el que da un error, pero ya será tarde para nosotros. Por lo menos si tenemos activada las gestiones online y no una verificación en dos pasos.
Claro está, recibir un correo de un banco del que no somos clientes es ya suficiente para desconfiar.
¿Te acuerdas de mí?
Esta fue la peor para mí. Hace más de 10 años empecé a recibir mensajes de una persona que conocía mi nombre, y el remitente era un número de 4 cifras. Otro lo habría tenido claro ya desde el principio, pero yo conocía a alguien que enviaba mensajes con un servicio que mostraba algo similar, por lo que me llamó la atención. No respondí nunca, en parte porque, en el mejor de los casos, no quería hablar con esa persona, pero me insistía una y otra vez…
Busqué por Internet ese número y se confirmó que era una estafa. Había gente que había respondido e incluso estaba ilusionada pensando que tenía ahí al amor de su vida, pero no. Cuando llamé a mi operadora para solucionarlo me dijeron que era una «alerta», que era «totalmente legal» y que alguien había dado mis datos para que pasara lo que estaba pasando. Me dijeron que enviara un mensaje con la palabra «BAJA» a ese número, lo hice y jamás volví a saber de aquella persona que tantas ganas tenía de reencontrarse conmigo. Jo…
Mamá, soy yo. Necesito ayuda y no tengo mi móvil
Esta no me ha pasado a mí, pero sí a mi madre. No recuerdo bien qué decían, pero era algo así, un familiar de mi madre que no tenía su teléfono y necesitaba ayuda. Mi madre no respondió porque me preguntó nada más recibir el mensaje, pero la intención es empezar una conversación para más adelante conseguir algo de dinero.
Consejos para evitar estafas por Internet
El mejor consejo que podemos dar es tener sentido común y desconfiar, no necesariamente en ese orden. Si un familiar ha perdido su móvil, ¿se sabe el mío de memoria? Lo dudo. Los bancos jamás nos pedirán que nos identifiquemos en sus páginas desde un correo. ¿Tu hermana es tímida? Yo lo soy más con los desconocidos a los que además no les veo la cara. Lo recomendable es eliminar el mensaje directamente y olvidarse.
Pero hay que estar preparado. Estas estafas están aumentando cada vez más, o por lo menos intentándolo.