Linux 6.8-rc1 llegó tras una semana movidita por la meteorología y con un tamaño por debajo de la media
Tras 6.7, una semana para recoger peticiones y otra no muy agradable por la meteorología, Linus Torvalds ha lanzado hace unas horas Linux 6.8-rc1. Es la primera Release Candidate de la próxima versión estable, y su tamaño es menor de lo habitual. Esto contrasta con la anterior ventana de fusión, que llegó con el tamaño más grande de siempre y con muchas novedades. El motivo del tamaño, según el padre de Linux, está relacionado con las vacaciones.
Por todo lo demás, la noticia más destacada es quizá eso del «clima desagradable», aunque no ha dado más detalles. Que eso sea lo más destacado significa que todo ha ido como se esperaba en las últimas dos semanas, con unos pocos «contratiempos técnicos».
Linux 6.8 llegará en marzo
«No ha sido la ventana de fusión más agradable, pero la mayor parte de las molestias no tenían nada que ver con el código base y casi todas estaban relacionadas con el mal tiempo. Sólo algunos contratiempos técnicos. Y después de una versión 6.7 muy grande, la 6.8 parece ser en realidad más pequeña que la media, aunque no tan significativamente.
Y aunque quizá sea un poco menor de lo habitual (culpo a las vacaciones), en general todo parece bastante normal. La mayor parte son actualizaciones de controladores (GPU y controladores de red son las grandes áreas como siempre, pero hay un poco de todo), pero también tenemos una buena parte de las actualizaciones del sistema de archivos (principalmente vfs núcleo, bcachefs, xfs y btrfs) y, obviamente, todas las actualizaciones habituales de arquitecturas».
Si no pasa nada muy extraño, Linux 6.8 llegará en marzo. Las cuentas dicen que el 3 llegaría la séptima RC y el 10 la versión estable, retrasando eso en siete días si hiciera falta una octava Release Candidate y en siete más si se lanzara algo que personalmente no recuerdo haber visto, la novena. En todos los casos cae dentro de marzo.
Y teniendo en cuenta que Ubuntu 24.04 llegará el 25 de abril, es más que probable que esta sea la versión de Linux que use la próxima versión LTS del sistema operativo de Canonical y sus sabores oficiales. Por lo tanto, los usuarios de Ubuntu que quieran instalarlo llegado el momento no tendrán que hacer nada, por lo menos los que vengan de 23.10, más allá de actualizar el sistema operativo. Y tienen que hacerlo, o en julio se quedarán sin soporte.
Los usuarios de una 22.04 y otras versiones LTS deberán esperar algo más, pero terminarán pudiendo actualizar a esa versión del kernel como parte del HWE (activación de hardware). El que quiera mantener la versión que trajo puede seguir este tutorial.