OBS Studio 32.0 llega subiendo el bitrate por defecto a 6000 Kbps y MP4/MOV híbrido pasa a ser el formato predeterminado
Con la llegada de OBS Studio 32.0, el ecosistema de streaming y grabación de escritorio recibe un empujón importante en estabilidad, funcionalidades y ajustes por defecto. Más allá de pequeñas mejoras, hay cambios que afectan directamente a la calidad de imagen, al flujo de trabajo con complementos y a la compatibilidad en macOS, Windows y Linux. Si usas OBS para transmitir o grabar a diario, esta versión se nota.
El desarrollo de esta entrega ha pasado por Beta 1, Beta 2, un Release Candidate y finalmente la versión estable. En ese camino se han incluido novedades como un gestor básico de plugins, la adopción de contenedores híbridos MP4/MOV como formato por defecto y la subida del bitrate predeterminado hasta 6000 Kbps, además de un buen puñado de correcciones críticas que eliminan bloqueos y rarezas.
Qué aporta OBS Studio 32.0 a partir de ahora
En la edición estable, se consolida un conjunto de mejoras que facilitan la vida a streamers y creadores. Lo más visible es que las nuevas instalaciones establecen como salida por defecto un contenedor híbrido MP4/MOV y un bitrate más alto, lo que se traduce en grabaciones y directos con mayor calidad de imagen desde el minuto uno.
También llega un gestor de complementos básico, pensado como primer paso para una administración más sencilla de extensiones. No es una revolución visual, pero implica un camino claro hacia una gestión centralizada de plugins dentro de la propia aplicación.
Gestor de plugins y compatibilidad en Linux: lo que cambia
OBS 32.0 integra un gestor de plugins básico que, aunque minimalista, ya soluciona problemas prácticos: se corrigieron fallos al cargar archivos de configuración inválidos y al interactuar con plugins que usaban APIs retiradas en betas anteriores, y se retoma cierta compatibilidad con plugins antiguos. En Linux, hubo un vaivén importante: en Beta 2 se eliminó la carga de plugins construidos para versiones mayores antiguas, pero en el Release Candidate esa decisión se revirtió, recuperando la compatibilidad con complementos heredados. Este giro fue un alivio para quienes dependen de plugins aún no actualizados.
Conviene matizar dos políticas complementarias que coexisten en 32.0: por un lado, OBS ya no cargará plugins creados para una versión futura (más nueva) del propio OBS, evitando así conflictos de compatibilidad; por otro, en Linux, el RC volvió a permitir plugins de versiones anteriores, retomando la flexibilidad para usuarios avanzados. Resultado: menos riesgo de choques con plugins demasiado nuevos y mayor margen con los antiguos.
Calidad por defecto mejorada: bitrate a 6000 Kbps
Un cambio que agradecerá casi cualquiera: el bitrate inicial de las salidas sube de 2500 a 6000 Kbps. Para quien instala OBS y emite sin tocar nada, esto supone un salto de nitidez notable en plataformas como Twitch o YouTube; por supuesto, siempre puedes ajustarlo a tus necesidades reales de ancho de banda.
Este ajuste por defecto suele estar más alineado con las recomendaciones de los servicios de streaming actuales, y reduce el número de pasos iniciales para obtener una calidad decente. Menos fricción y mejores resultados de serie.
Nuevo formato predeterminado: contenedores híbridos MP4/MOV
OBS adopta contenedores híbridos MP4/MOV como formato de salida por defecto para nuevos perfiles. ¿Qué ganas con esto? En macOS, soporte directo para ProRes; y en todas las plataformas, una opción de audio más compatible al combinar HEVC o H.264 con PCM. En la práctica, mayor interoperabilidad en edición y reproducción.
Además, se ha aumentado la precisión de los marcadores de capítulo en estos contenedores híbridos y se han resuelto incidencias al dividir archivos MP4 híbridos en ciertos casos. El objetivo es claro: evitar sorpresas al postproducir o enviar material a otras herramientas.
Audio y vídeo: mejoras con NVIDIA, AMD y PipeWire
Para quienes usan los efectos de NVIDIA RTX, hay dos novedades jugosas. Se añade detección de actividad de voz (VAD) a los filtros de audio de NVIDIA RTX, mejorando la supresión de ruido centrada en el habla, y se incorpora una opción curiosa al efecto de eliminación de fondo: la posibilidad de eliminar también la silla en el encuadre.
En el lado de AMD, se actualizan las configuraciones predeterminadas de los codificadores y se corrige el ajuste de rango de color en AV1. También se refina la lógica de desduplicación de audio para cubrir más casos de escenas anidadas, grupos y múltiples lienzos, y se previene la duplicación cuando una fuente está en modo monitorizar y salida mientras el dispositivo de monitoreo se está capturando. Menos eco, menos duplicaciones, audio más limpio.
Para Linux, OBS 32.0 mejora la selección de formatos en la captura por PipeWire, reduciendo situaciones en las que ciertas combinaciones de formato daban problemas o requerían ajustes manuales, como recogen las mejoras en PipeWire. Capturas más estables y compatibles en entornos Wayland.
OBS Studio 32.0 trae Metal en fase experimental a Mac con Apple Silicon
OBS 32.0 introduce un renderizador Metal experimental en Macs con Apple Silicon. Aunque todavía está en fase temprana, es un movimiento clave de cara a la optimización en macOS. La idea es aprovechar mejor el hardware moderno de Apple, con un camino de mejoras progresivas en futuras versiones.
También se han realizado ajustes menores para macOS, como volver a ocultar el cursor en campos de edición y corregir el enfoque en las opciones de teclas rápidas, aspectos que aunque pequeños, mejoran la experiencia diaria. Pequeños pulidos que evitan distracciones.
Usabilidad y pequeñas mejoras en la interfaz
El Administrador de complementos recibió un ajuste de interfaz que facilita su navegación. No es un rediseño total, pero se ha buscado que la gestión sea más clara y fluida, sin curvas de aprendizaje.
Por otra parte, se añadieron widgets personalizados de OBS como preparación para cambios de interfaz mayores, y se reubicó el archivo centinela de fallos en su propio subdirectorio para mantener el orden. Todo apunta a una interfaz más modular y preparada para crecer.
Subida de estabilidad en OBS Studio 32.0: correcciones que evitan disgustos
La lista de arreglos en 32.0 es larga y ataca fallos críticos que podían afectar grabaciones o directos. Se resolvieron varios bloqueos relacionados con SRT (URLs inválidas, reconexiones o tamaños de paquete no predeterminados), y un crash en la fuente de medios al iniciar la reproducción con algunos vídeos. Menos riesgo de caídas a mitad de emisión.
En macOS se solventó un raro bloqueo al mover o cambiar el tamaño de la ventana, se restauró la captura por encima de 60 fps con la captura de pantalla nativa y se corrigió la visibilidad del foco en las teclas rápidas. Para quien hace producción en Mac, esto se traduce en más fluidez.
También se solucionó un problema por el que la multivista podía quedarse en blanco en ocasiones, y se mejoró la conciencia sRGB en el renderizado de texturas para evitar interpretaciones de color incorrectas. La consistencia visual sale beneficiada.
Arreglos específicos de OBS Studio 32.0 en Windows y Linux
En Windows se corrigió un interbloqueo de la interfaz al abrir propiedades desde la lista de Orígenes en sistemas con la opción de mover el ratón al botón predeterminado activada, introduciendo un retardo de 200 ms al crear la ventana de propiedades. Adiós a congelamientos inesperados al retocar una fuente.
En Linux, además de los avances con PipeWire, se solucionaron problemas con fuentes del navegador (incluyendo stack smash y TLS en betas), y se afinó el manejo de compatibilidad de plugins durante el ciclo Beta 2 y RC. Más estabilidad en navegadores embebidos y compatibilidad de extensiones.
Subida de robustez en la salida y codificación
Se ajustó el comportamiento ante paradas temporales del codificador que podían aumentar la latencia de la salida, mitigando ese efecto para evitar picos que afecten al espectador. También se corrigió la prioridad de fotogramas en HEVC en escenarios que provocaban errores de reproducción al soltar frames. El flujo de salida se comporta mejor ante situaciones límite.
En entornos donde se divide el archivo MP4 híbrido, esa división ya no debería fallar y se ha resuelto un par de fugas de memoria, incluida una al intentar sacar un MP4 híbrido en una ubicación sin permisos de escritura. La gestión de archivos y memoria se vuelve más predecible.
Privacidad y telemetría de fallos bajo control
Windows y macOS incorporan la subida automática de registros de fallos en modo voluntario. Es decir, solo si el usuario lo permite. Se corrigió además una situación en la que en sistemas no soportados aparecía un aviso de registro de fallos cuando OBS no estaba preparado para gestionarlos. Mejor diagnóstico cuando algo va mal, sin sorpresas de privacidad.
Detalles que suman: temas, scrollbars y pequeñas molestias
En temas como Light y Rachni, las barras de desplazamiento vuelven a ser visibles, se corrigen temas de enfoque visual y se evita la duplicación de audio en dispositivos de monitoreo, un ajuste que parece menor pero que puede ahorrar tiempo al depurar rutas de señal. Ese tipo de fricciones cotidianas quedan más pulidas.
Otros ajustes variados: se eliminó la marca de lanzamiento para desactivar la comprobación de apagado, se mejoró la selección de formato en capturas y se añadieron pequeños retoques a la apariencia del mezclador de volumen en temas clásicos durante el ciclo beta. La aplicación se siente más coherente a nivel estético.
Consejos prácticos tras actualizar a OBS Studio 32.0
Si creas un perfil nuevo, verifica que el contenedor de salida está en híbrido MP4/MOV y que el bitrate encaja con tu conexión. En NVIDIA, prueba el filtro con VAD para voz y, si usas clave croma o fondos virtuales, experimenta con la opción para retirar la silla. Pequeños ajustes pueden darte una mejora inmediata.
En Linux, revisa la compatibilidad de plugins si venías de una versión más antigua; la reintroducción del soporte a complementos heredados te puede ahorrar tiempo, pero conviene chequear versiones y dependencias. En macOS, si trabajas con Apple Silicon, echa un ojo a Metal y monitoriza el rendimiento de tus escenas. El terreno está preparado para mejoras futuras.
Para quien depende de SRT, conviene validar URLs y parámetros de red tras actualizar, aprovechando que se han corregido varios puntos problemáticos. Y si editas postproducción en macOS, ProRes vía MOV híbrido puede simplificar tu pipeline. Menos fricción entre captura, emisión y edición.
La suma de cambios y fixes de OBS Studio 32.0 no es solo un check de funcionalidades: se nota en el día a día con menos fallos tontos, ajustes por defecto más sensatos y una base técnica que apunta alto en interfaz y renderizado, especialmente con Metal en el horizonte. Para cualquier creador, es una versión que merece el salto.