Prehistoria de la nube. Cómo llegamos hasta acá
Nos guste o no, la manera en la que nos relacionamos con la tecnología está cambiando. Los días en los que éramos propietarios de las herramientas informáticas que usamos y los dispositivos de almacenamiento en los que guardamos nuestros datos, están llegando a su fin. Por supuesto, que en informática nada desaparece del todo. Seguirá habiendo ofertas marginales de productos y servicios para aquellos usuarios que no quieran hacer el cambio o que prefieran no poner todos los huevos en la canasta de un proveedor externo.
De todas formas, dado que el rumbo que está tomando la industria parece inexorable, resulta interesante saber que medidas podemos adoptar como usuarios para tener garantizados la privacidad e integridad de nuestros datos. También es bueno tener un plan de contigencias por si nuestro actual proveedor deja de sernos útiles.
Es por eso que en esta serie de artículos vamos a analizar los aspectos básicos de la computación en la nube y las alternativas de código abierto a algunos de los servicios cloud más populares. Pero, para saber adonde vamos es importante saber de dónde venimos
La prehistoria de la nube. De dónde venimos
Hay un error que muchos cometen cuando se habla de la computación en la nube. Es el de confundirla con la tercerización de servicios informáticos. Aún cuando la nube implica una tercerización, no toda tercerización es computación en la nube.
Estoy usando la palabra tercerización en un sentido muy amplio. La utilizo para marcar la delegación a un equipo remoto de tareas que normalmente se ejecutaban en un equipo local. Más adelante veremos que no es necesario contratar un proveedor externo para utilizar este tipo de servicios
Lo que distingue a la computación en la nube son dos características:
Escalabilidad: Los recursos utilizados de los equipos remotos se asignan adaptándose a la necesidad momentánea de los usuarios.
Emulación: Los equipos remotos pueden virtualizar múltiples combinaciones de software y hardware.
Los historiadores de la tecnología atribuyen la paternidad del concepto de Cloud Computing a John Mc Carthy, el padre de la Inteligencia Artificial. Por lo que sé, Mc Carthy lo que postulaba era el modelo de tiempo compartido. Las empresas que dispusieran de recursos informáticos podrían alquilar su utilización en momentos de ocio a aquellas otras que no pudieran solventar los costos de comprar sus propios equipos.
El primer paso práctico para el actual modelo se dio a fines de la década del 60 con la creación de ARPANET. Por iniciativa del Departamento de defensa de EE.UU se creó una red que interconectaba los equipos de universidades y organismos estatales.
Arpanet nació con 4 nodos y continuó creciendo hasta 1990 en que se pasó al protocolo TCP/IP
En materia de software, el primer paso lo dio el Instituto tecnológico de Massachusetts. Su Instituto de Computación creó el Sistema de Tiempo Compartido Compatible (CTSS). Su diseño se basa en la idea de que los sistemas operativos pueden trabajar en múltiples tareas simultáneas. Los anteriores ordenadores centrales y sistemas informáticos sólo trabajaban en un proceso a la vez, de forma lineal.
La versión original funcionaba en un ordenador central IBM 7094 con dos bancos de memoria central de 32K. El segundo banco se usaba para la implementación del tiempo compartido. El CTSS estaba conectado a impresoras, lectores de tarjetas perforadas y unidades de cinta.
En 1972, utilizando el concepto del MIT, IBM lanzá su VM/370. Se trata de un sistema operativo que permite a diferentes usuarios ejecutar máquinas virtuales de manera simultánea.
Aunque en la década del 80 los equipos hogareños de entonces eran capaces de conectarse a algunos proveedores remotos que brindaban contenidos y formas de comunicación entre usuarios, hay que esperar hasta 1999 para encontrar el primer antecedente de un servicio en la nube moderno.
Salesforce ofreció a las empresas un servicio para que sus vendedores subieran los informes de su desempeño a la web y los supervisores acceder online a los reportes resultantes del procesamiento de los mismos.
En nuestro próximo artículo vamos a repasar brevemente los acontecimientos más importantes de los últimos veinte años incluyendo como el código abierto se convirtió en un jugador importante.