Si compro un producto es mío, pero si compro un Tesla…
Antes de comenzar a abordar el tema del artículo, sé que muchos vendrán a decir que esto no tiene que ver con Linux, software libre, etc y sobre todo tampoco estoy nada cerca de poder siquiera aspirar a adquirir un Telsa (aunque en su momento en México, un banco ofrecía un crédito bastante atractivo, pero me condenaba a comer aire por al menos 6 años), pero al menos si puedo decirles que Tesla tiene Linux en sus entrañas.
Dejando de lado un poco el sarcasmo y entrando al tema de la publicación del día de hoy a la que quiero llegar, la primer parte es tomar como referencia la reciente noticia que se dio a conocer sobre un grupo de investigadores lograron desbloquear las opciones bloqueadas por software en los Teslas.
Para quienes aún desconocen sobre Tesla, deben saber que este es un fabricante de automóviles eléctricos dirigido por Elon Musk, que ofrece a sus clientes muchas funciones que se pueden habilitar o deshabilitar mediante software, pago o suscripción.
Este grupo llamo a su logro como «Tesla Jailbreak» y que literalmente hace referencia al término utilizado para desbloquear dispositivos Apple, ya que descubrieron una falla en la computadora de a bordo de Tesla que les permite desbloquear estas funciones sin pagar.
Al hacer esto, los investigadores esencialmente encontraron una forma de hacer jailbreak al automóvil. Esto no solo aprovecha el acceso abierto a funciones pagas como Acceleration Boost y asientos con calefacción, sino que también les dio acceso a la red interna de Tesla para modificaciones más sofisticadas.
Esto incluyó romper las restricciones de geolocalización en la navegación y beta FSD (en regiones donde esas opciones normalmente no están disponibles), así como la capacidad de transferir un perfil de usuario de un vehículo a otro Tesla. Sin embargo, cabe señalar que los investigadores no probaron todas estas capacidades, lo que indica que esto requeriría más ingeniería inversa.
«No somos el extraño malvado, pero en realidad somos los de adentro, somos dueños del auto», dijo Werling. «Y no queremos pagar esos $300 por los asientos traseros con calefacción».
“Actualmente, nuestro ataque puede ser aplicado por personas con experiencia en ingeniería electrónica, un soldador y la capacidad de comprar hardware adicional por alrededor de $100. Recomendamos usar una placa de desarrollo Teensy 4.0 para problemas de voltaje que se pueden usar fácilmente con nuestro programador flash SPI abierto y un analizador lógico puede ser de gran ayuda para depurar el ataque general”
Se menciona que durante sus pruebas lo que hicieron fue “jugar” con la tensión de alimentación del procesador AMD que ejecuta el sistema de infoentretenimiento, lo que les permite eludir el mecanismo de seguridad del procesador y obtener acceso completo al sistema Linux que ejecuta el software de Tesla. De este modo, pueden ejecutar cualquier programa y modificar los parámetros de las funcionalidades bloqueadas.
Hasta este punto, creo que ya muchos podrán entender el porqué del título del artículo y el cómo el actual modelo de monetización que utilizan los desarrolladores de aplicaciones y sobre todo de videojuegos, está siendo aplicado de una forma bastante absurda a otros sectores.
Y es que por ejemplo, en una aplicacion o juego Freemium, si quieres acceder a nuevas funciones o contenido debes pagar y creo que para muchos es lógico y está bien, nadie pierde la cabeza con ello. Ya que al menos muchos lo vemos como si fuera como antes que comprabas tu aplicacion o juego en formato fisco (cd/dvd) o en formato digital y con ello solo tenías acceso a lo que se ofrecía en ese momento.
Pero el problema entra cuando adquieres un producto el cual ya viene equipado con X función o accesorio, pero hay un detalle, esa función o accesorio no lo puedes usar porque debes pagar otra cantidad más para poder utilizarla, algo que para mí y creo que para muchos es absurdo, al menos en la situación de cuando ya está incluido, pero está deshabilitado. En cuanto a las funciones extras de software, que estás si son adicionales, no hay problema, si quieres pagar por X soporte que no estaba disponible o que no es parte de tu producto como tal, está bien.
Y aquí es donde uno como supuesto “dueño” se pregunta, ¿realmente es de mi propiedad?, ¿Qué derechos tengo realmente sobre mi supuesta adquisición?
Finalmente puedo decir que este modelo de «monetización» no es que sea malo, sino que se debe tomar conciencia en donde sí y donde no aplica, ya que no solo en la industria automotriz están queriendo aprovecharse de eso, ya que por ejemplo tambien Intel ya está explorando este nuevo modelo.
Si estás interesado en poder conocer más al respecto, puedes consultar los detalles en el siguiente enlace.