Twitter ya no es una empresa independiente
Elon Musk entró en Twitter con la sutileza de un elefante en una cristalería, despidió a medio mundo, cambió las formas de trabajar y transformó en pagas cosas que antes eran gratuitas. Ahora Twitter dejó de ser una empresa independiente.
Para comprar Twitter, Musk creó una empresa llamada X Corporation ofreciendo a los empleados de la ex empresa del pajarito. Una presentación judicial posterior informó que Twitter Inc ya no existe pasando todos sus derechos y obligaciones a X Corporation
¿Por qué Twitter ya no es una empresa independiente?
Llevo años quejándome de los continuos cambios de rumbo de Mark Shuttleworth, pero Elon Musk ha dejado a su compatriota sudafricano fundador de Ubuntu cómo un ejemplo de constancia. Aunque nadie sabe lo que pretende se especula con que lance una aplicación todo en uno que combine la capacidad de hacer pagos, realizar compras, compartir y consumir contenido y enviar mensajes. Sin embargo, otros sostienen que es solo una cuestión organizativa que busca poner todas sus empresas bajo el paraguas de una misma corporación.
La respuesta de Musk consistió en un tweet de una sola letra, la X.
Un indicio de que Musk está planeando algo es el reciente bloqueo a Substack, una plataforma de creación y distribución de contenidos que recientemente acaba de incorporar la modalidad de microblogging. Cuando usuarios de esa plataforma se quejaron se les sugirió que publicaran sus artículos en Twitter. La plataforma viene prometiendo hace algún tiempo una solución de monetización para creadores.
Además de la resistencia al cambio de los usuarios, Musk enfrenta otro desafió. El gobierno norteamericano está decidido a poner fin a las prácticas antimonopólicas y de poca protección a la privacidad de las grandes tecnológicas. El creador de Tesla está en las antípodas políticas de la administración Biden, por lo que podría ser un buen candidato para dar el ejemplo.
No es la primera vez que Musk quiere cambiar el nombre de una marca reconocida por la letra X, quiso hacerlo cuando su X Bank se fusionó com Paypal y perdió la votación. Ahora tomó la precaución de ser el único que vota.
En principio la movida de Musk tiene sentido ya que el mercado de las redes sociales está saturado. Google con todo su poder intentó ingresar varias veces fracasando en todas y, los jugadores establecidos no logran obtener ganancias. Las medidas de Musk de cobrar por funciones que antes eran gratis solo cubrirán una fracción de la deuda que contrajo.
Jack Dorsey, el creador de Twitter llegó a la conclusión de que como empresa era inviable y que debería haberse transformado en la base de otros servicios. Ahora se encuentra trabajando en un servicio de mensajes basado en blockchain.
Una teoría conspirativa sobre los planes de Musk
Acá se termina la parte seria del artículo, pónganse su sombrero de aluminio para prevenir que la CIA capte sus ondas cerebrales y sigan leyendo por su cuenta y riesgo.
Un tal David Troy, autodenominado periodista de investigación independiente, sostiene que Musk y otros inversores en Twitter como el príncipe saudí Alwaleed bin Talal bin Abdulaziz, Qatar y el propio Dorsey planean utilizar la influencia de la red social para bajar el dólar y reemplazarlo por criptomonedas.
Al mejor estilo de Goebbels, Troy intenta justificar su teoría combinando dos acontecimientos que no tienen nada que ver. Sin que venga al caso, mete a Vladimir Putin, la invasión a Ucrania y el deseo del mandatario de crear un nuevo orden mundial liderado por los BRICS (Brasil, Rusia, India, china y Sudáfrica) con la postura de Musk y algunos de sus antiguos y actuales socios a favor de reemplazar los billetes en papel por una moneda independiente de los intereses financieros y políticos.
Curiosamente se le pasó el dato de que Musk es sudafricano.
¿Decisión de marketing, reorganización corporativa o conspiración? Creo que el verdadero problema del señor Troy con Musk se encuentra en este párrafo.
Mientras Putin condena los géneros múltiples y la homosexualidad, Musk pide a los anunciantes que rechacen la «corrección política» en favor de la «libertad de expresión». Mientras que la democracia tiende a aplanar las sociedades e igualar las oportunidades para todos, la autocracia tiende a enfatizar la jerarquía y la riqueza. Musk, como el hombre más rico del mundo, ha llegado a creer que encarna la cúspide de dicha jerarquía, y parece tratar de imponerla a los demás.
Sin embargo, algo hay que decir a favor del hombre. Por fin una teoría conspirativa que tiene la originalidad de no incluir a Soros y Bill Gates.