En el ecosistema de Linux, los paquetes Flatpak se han consolidado como una alternativa flexible y práctica frente a las paqueterías tradicionales. Sin embargo, su modo de funcionamiento, que prioriza la separación del sistema mediante el sandbox, puede dificultar la gestión de aplicaciones, especialmente cuando se acumulen ficheros residuales. Para solucionar este desafío aparece Warehouse, una herramienta sencilla pero poderosa que transforma la experiencia de gestión de aplicaciones Flatpak.

Warehouse es ideal para quienes buscan simplicidad y eficiencia. Se trata de una interfaz gráfica que permite manejar instalaciones, eliminar datos de usuario sobrantes y administrar repositorios de forma intuitiva. A continuación, exploraremos en profundidad sus características, cómo instalarla en Ubuntu y otros elementos clave que la convierten en una opción imprescindible para los usuarios de Flatpak.

¿Qué es Warehouse y qué lo hace especial?

Warehouse es una aplicación diseñada específicamente para gestionar aplicaciones Flatpak con un enfoque en la facilidad de uso. Inspirada en el diseño moderno de GNOME, esta herramienta gráfica sustituye muchas de las interacciones basadas en línea de comandos, ofreciendo una experiencia visual que simplifica tareas complejas.

Entre sus funciones principales destacan la visualización de detalles completos de las aplicaciones instaladas, el cambio entre versiones de aplicaciones, y la eliminación de datos sobrantes tanto al momento de desinstalar como a posteriori. Además, Warehouse permite realizar acciones en lote, lo que ahorra tiempo en la gestión de múltiples aplicaciones.

Funciones clave de Warehouse

Warehouse no solo facilita la gestión de Flatpaks, sino que también añade funcionalidades avanzadas que mejoran la experiencia del usuario:

• Gestión de aplicaciones: Permite listar y ordenar aplicaciones instaladas, mostrando propiedades como ID, tamaño de instalación o descripción.
• Control de versiones: Proporciona la opción de regresar a versiones anteriores de una aplicación en caso de actualizaciones no deseadas, siempre que la versión anterior esté disponible en el repositorio.
• Eliminación de datos sobrantes: Identifica ficheros que ya no están asociados a aplicaciones instaladas y ofrece la opción de eliminarlos para liberar espacio.
• Administración de repositorios: Facilita la adición o eliminación de remotos como Flathub, permitiendo también la integración con repositorios personalizados.
• Respaldo de datos: Funciones para tomar snapshots de datos de usuario antes de realizar acciones potencialmente arriesgadas.

Y por qué importa para los usuarios de Ubuntu

Warehouse es una herramienta útil para usuarios de Linux, pero especialmente los de Ubuntu en su edición principal con GNOME. Aunque ya hemos explicado cómo habilitar el soporte para Flatpak en Ubuntu, el proceso requiere la instalación de la tienda oficial de GNOME, o instalar los paquetes desde el terminal. No es mala opción, pero si tenemos que instalar algo diferente a App Center sólo para gestionar paquetes Flatpak, quizá sea mejor idea instalar una herramienta específica como Warehouse.

La importancia de usar una herramienta como Warehouse en Ubuntu radica principalmente en la restricción impuesta por Canonical, que no soporta los paquetes Flatpak. No es tan necesario en otros sabores, como Kubuntu, en donde se puede hacer todo desde Discover.

Instalación de Warehouse en Ubuntu

Para usar Warehouse, primero es necesario tener Flatpak configurado en el sistema. En Ubuntu, es posible instalar Flatpak mediante el siguiente comando:

sudo apt install flatpak

Luego, se añade el repositorio de Flathub, ya que Warehouse está disponible allí:

flatpak remote-add --if-not-exists flathub https://dl.flathub.org/repo/flathub.flatpakrepo

Finalmente, se instala Warehouse con este comando:

flatpak install flathub io.github.flattool.Warehouse

Una vez instalado, ya se puede iniciar desde el menú de aplicaciones o ejecutando:

flatpak run io.github.flattool.Warehouse

Una interfaz amigable y flexible

Al abrir Warehouse, te encontrarás con una interfaz ordenada que facilita la navegación entre las aplicaciones instaladas. Sus opciones son claras y prácticas, permitiendo desde la instalación de nuevas aplicaciones desde un archivo .flatpakref hasta la gestión avanzada de datos y remotos.

Por ejemplo, si optas por instalar una aplicación a nivel del sistema, esta se almacenará en /var/lib/flatpak/app, lo que permitirá que todos los usuarios puedan usarla. Si prefieres más privacidad, puedes instalarla a nivel del usuario, ubicándola en ~/.local/share/flatpak/app.

Además, su capacidad para realizar acciones en lote, como desinstalaciones masivas o limpieza de datos de usuario, lo convierten en una herramienta poderosa para mantener un sistema ordenado.

Warehouse es una solución eficiente para cualquier usuario que emplee Flatpaks en su día a día. Su diseño intuitivo, sumado a sus funcionalidades avanzadas, lo posiciona como una herramienta imprescindible para gestionar aplicaciones en entornos Linux con facilidad y eficacia. Al integrarse con Flathub y otros remotos, ofrece una experiencia completa que se adapta tanto a novatos como a usuarios avanzados.