Ya no habrán nuevas imágenes de instalación de Ubuntu Server para 32-bit. Siguiendo el movimiento emprendido con la edición principal de Ubuntu, la imagen para servidores se despide también de la vieja arquitectura y lo hace desde ya, según cuentan en las listas de correo de la distribución.

Así, la próxima Ubuntu 18.04 LTS que se espera para abril será la primera versión para x86 puramente de 64-bit, con la excepción del medio de instalación en red mediante el cual se podrá seguir construyendo un sistema casi desde cero, incluyendo la posibilidad de instalar un sistema de 32-bit (i386) completo (también para PC con Unity como escritorio si se quiere, aunque es probable que no merezca la pena llegar a ese extremo porque ya existe una iniciativa comunitaria trabajando en ello).

Asimismo quedan por salir un par de versiones de mantenimiento de Ubuntu 16.04 LTS de las que no se ha comentado nada y de las que, por lo tanto, cabe esperar ofrezcan imágenes de 32-bit; pero lo que se refiere a nuevos lanzamientos, el adiós está dado.

Los paquetes de 32-bit seguirán disponibles en los repositorios, por lo que aquellos usuarios que ya tengan Ubuntu instalado -sin importar si se trata de la edición servidor o escritorio- podrán actualizar de versión manteniendo el soporte, así como instalar los paquetes que necesiten. Esta situación se prolongará como mínimo durante el ciclo de vida de Ubuntu 18.04 LTS.

La decisión de Canonical no supone ninguna sorpresa, sino que confirma lo que estaba previsto. Los 32-bit están en vías de extinción también en los servidores, o mejor sería decir especialmente en los servidores. En cuanto al escritorio, todas las ediciones oficiales (Kubuntu, Xubuntu, Lubuntu…) excepto la propia Ubuntu continuarán ofreciendo los instaladores de siempre y no serán las únicas.