Gentoo ha experimentado grandes avances en el año 2020
Hace tiempo que no publicamos sobre Gentoo, la conocida distribución Linux que destaca por la utilización Portage para la gestión de los paquetes, con el que compila muchos componentes a partir del código fuente, y por su modelo de actualización rolling release, que evita la necesidad de reinstalar el sistema. Otras características que se podrían destacar son su relativa cercanía al espectro BSD y el hecho de ser un sistema más bien orientado a usuarios avanzados.
Sin embargo, que Gentoo no acapare últimamente mucha atención no quiere decir que sea una distribución en decadencia, sino todo lo contrario. 2020 será recordado como el peor año que ha vivido la humanidad en décadas, pero ese mismo contexto ha servido para aumentar el interés en GNU/Linux. En el caso de Gentoo, el número total de commits a su repositorio oficial ha crecido un 42% en comparación con el año 2019, pasando de 73.400 a 104.500, mientras que los commits hechos por personas que no son desarrolladoras ha subido de 5.700 (8% del total) a 11.000 (10,5% del total). Por último tenemos los autores únicos, cuyo número ha subido de 333 en 2019 a 391 en 2020.
El capital ganado por Gentoo parece haberse transformado en cosas positivas para el proyecto. Para empezar, el sistema ha ganado la capacidad de “soportar la compilación e instalación completa de los kernels a través del administrador de paquetes. Los nuevos paquetes de kernel también vienen con una configuración de stock (opcional) basada en los kernels probados Fedora con el fin de aliviar la barrera de entrada y el esfuerzo de mantenimiento de los sistemas Gentoo.”
Otro punto que parece haber progresado mucho en Gentoo a lo largo del año 2020 es Wayland, el protocolo gráfico llamado a suceder a Xorg algún día, si bien la fecha parece cada vez más lejana. Los encargados de la distribución han resaltado que ahora es “posible ejecutar un escritorio sin Xorg” en el sistema, mencionando los entornos de escritorio de escritorio GNOME y KDE Plasma y los gestores de ventana Sway y Wayfire. Entre los múltiples contextos en los que Xorg no resulta del todo competitivo en los tiempos actuales, se puede destacar el de la seguridad, donde tiene una serie de graves fallos que son imposibles de solucionar.
En lo que respecta a componentes de programación tenemos la creación de un marco que permite instalar diversas versiones de Lua y los grandes avances en la transición de Python 2.7 a la versión 3.8 del mismo lenguaje, ya que Python 2 fue descontinuado a comienzos de 2020. En cuanto a arquitecturas tenemos la elevación de ARM64 a la condición de estable, la disponibilidad de KDE Plasma para PPC64, el inicio del trabajo para soportar RISC-V y un nuevo tarball prefix para Android de 64-bit.
Pero no solo en componentes, partes y soporte del sistema ha mejorado Gentoo, sino también en su infraestructura, donde el sitio web de paquetes ha recibido numerosas mejoras para mostrar una información más completa y se ha mejorado el rendimiento de su implementación de Bugzilla, el mecanismo de reporte de errores.
Como vemos, Gentoo parece haber empezado 2021 en plena forma, sobre todo por el capital humano que aparentemente ha ganado durante el año pasado. Los que quieran conocer todos los detalles sobre los avances experimentados por el proyecto a lo largo del año 2020 pueden consultar la correspondiente entrada en su sección de noticias.