Linux remplazará términos como «master / slave» o «whitelist / blacklist»
La corrección política sigue cosechando victorias fatuas en el mundo de la tecnología y después de extender e imponer su particular visión del mundo en multitud de proyectos y organizaciones, le ha llegado el turno a Linux, la joya de la corona del software de código abierto.
Ha sido el mismo Linus Torvalds -tras el oportuno debate y su aceptación sin oposición destacable al cambio- quien ha dado luz verde al reemplazo de según qué términos largo tiempo utilizados, por otros que no ofendan a determinados colectivos o, con mayor precisión, a determinada gente dentro de esos colectivos e incluso fuera de ellos.
La sorpresa es nula y al igual que han hecho multitud de proyectos, véase el reciente ejemplo de GitHub, las palabras prohibidas que pasarán a la historia en el desarrollo de Linux incluyen términos como «master / slave» o «whitelist / blacklist«, que serán reemplazados por otros acordes al significado que corresponda. Y los hay más explícitos si cabe.
De esta manera, para la pareja «master / slave» se baraja adoptar «primary / secondary», «main / replica», «main / subordinate», «leader / follower» y algunos más, mientras que para «whitelist / blacklist» se habla de «denylist / allowlist» o «blocklist / passlist». Cuáles serán los finalmente elegidos lo sabremos seguramente con el lanzamiento de Linux 5.8, al que no le queda mucho en el horno.
El supuesto lenguaje inclusivo se impone así en el proyecto Linux y la proposición, aunque apenas tuvo disidencia, llegó a generar ocurrencias de todo tipo. Por ejemplo, se habló de reemplazar las referencias de «blanco / negro» por «verde / rojo», al estilo de los semáforos, pero no parecían funcionar bien en su forma escrita y se obviaron.
Ahora bien, ¿servirán todos estos cambios -todos en general- para reducir las injusticias que existen entre seres humanos cuya gran diferencia a simple vista es el tono de su piel, cuando términos como luz y oscuridad han sido empleados por la humanidad desde el principio de los tiempos?
Según el desarrollador que ha llevado adelante esta iniciativa, el motivo es más espurio: «La revelación de 2020 fue que las voces negras han sido escuchadas a escala global y el proyecto del kernel de Linux ha hecho su pequeño aporte para responder esa llamada ya que quiere voces negras, entre todas las voces, en su comunidad de desarrolladores«.
Así las cosas, habrá que acostumbrarse a este ‘nueva normalidad’ que, dicho sea de paso, tampoco parece especialmente complicada de asumir.