Parece que los desarrolladores de Blue Systems no entienden de pausas o descansos y si comenzábamos la semana con el estreno de Netrunner Core, la cerramos con la segunda versión de Maui. ¿Alguien busca una distro basada en Ubuntu que ponga por delante al escritorio de KDE? Tal vez sea esta.

Por si alguien no la conocía, recordamos que Maui se destapó el pasado agosto como reemplazo de la versión regular de Netrunner, que hasta ese momento se basaba en Kubuntu y ya con el nuevo nombre lo hace en KDE Neon. Por el contrario Netrunner Core sustituye a Netrunner Rolling, cambiando Manjaro por Debian estable. La primera se enfoca en los usuarios que gustan de un buen conjunto de software preinstalado por defecto, mientras que la segunda se dirige a configuraciones de hardware más modestas o usuarios que prefieran un escritorio más espartano para añadirle lo que quieran.

Pero si ya se conocía, lo que cabe preguntarse es qué trae de nuevo Maui 2. Y la respuesta es… más de lo que podría esperarse. Para empezar, actualizaciones en todo el software, desde el kernel Linux 4.4 de Ubuntu 16.04 LTS a Qt 5.7.0, KDE Frameworks 5.27 o Plasma 5.8.2. Otras novedades incluyen la recuperación del gestor de controladores privativos o el cambio de Gparted por el particionador propio del proyecto KDE con el fin de ofrecer una mejor integración con el entorno (si suena raro, es normal; pero así son en Netrunner).

Con todo, dos novedades se llevan la palma en Maui 2: Calamares como instalador de sistema de pleno derecho y nuevos repositorios que engloban los suyos propios y los de KDE Neon, clonados para la ocasión en una nueva infraestructura con la que pretenden facilitar el proceso de administración y liberación de actualizaciones de acuerdo a las políticas de la distribución.

¿A quién le apetece probar? En la página oficial de Maui encontraréis mucha más información y la descarga de la distro, solo para 64-bit.