Hacía bastante tiempo que no le dedicábamos tanta atención a una versión en desarrollo de Ubuntu, mucho menos a una la versiones cortas, cuyo interés práctico es limitado. Pero es que Ubuntu 17.10 va a ser un lanzamiento muy señalado por varios motivos, si bien todo gira en torno a un nombre propio: GNOME. Que Ubuntu vuelve al cien por cien con GNOME significa, entre otras cosas, que desaparece lo que conocíamos por Ubuntu GNOME. También que “desaparece Unity“, entre comillas.

¿Estás cansado de leer sobre Unity? Es comprensible, pero el cambio tiene miga. A grandes rasgos, una mayoría de los usuarios de Ubuntu usa Unity, es decir, el hasta ahora escritorio oficial y predeterminado de la distribución. Y aunque ya advertimos que este nuevo trago será mucho menos doloroso que el anterior, es decir, que muy probablemente la mayoría de usuarios de Ubuntu se quede en la opción principal, no quita que por el camino se pierdan alguna de las mejores características del escritorio Linux.

Sin embargo, no es necesario ser derrotistas. Los amantes de Unity tienen la posibilidad tanto de no dejar de lado al escritorio, como de reemplazarlo por lo que sea más de su agrado, en el caso de que GNOME no cumpla con las expectativas. O lo que es lo mismo, Ubuntu 16.04 LTS seguirá en curso hasta 2021, mientras que Unity se mantendrá disponible en los repositorios por al menos un par de versiones más. Además, hay otros escritorios que en un momento dado se pueden adaptar a las exigencias, y si no que se lo pregunten a los desarrolladores de Ubuntu MATE.

Ubuntu MATE por defecto

Al igual que ya hicieran trayendo al viejo GNOME de vuelta con una experiencia de uso prácticamente calcada a la de Ubuntu 10.10 y versiones previas, con Ubuntu MATE 17.10 son los propios responsables del proyecto quienes dan la bienvenida a los refugiados de Unity. Y lo hacen, como no podía ser de otra manera, ofreciendo un sucedáneo muy conseguido, incluyendo lanzador a la izquierda, menú global, HUD, indicadores y soporte para la tecla Super. ¿Cómo te has quedado?

Es cierto que un menú global sin integración con los bordes y botones de la ventana sabe a poco, que el HUD de MATE -que ya conocíamos, aunque ahora será mejorado- no alcanza al de Unity, y que el menú de aplicaciones tampoco tiene nada que ver con el tablero de Unity. De ahí que lo llame sucedáneo. Pero, dentro de las posibilidades del equipo de Ubuntu MATE, está muy bien planteado.

¿Pero acaso estoy diciendo que Ubuntu MATE 17.10 cambia su aspecto para parecerse a Unity? Sí y no. Ubuntu MATE 17.10 seguirá con su esquema tradicional por defecto, pero a través de MATE Tweaks permitirá cambiar con apenas un par de clics entre diferentes disposiciones de escritorio, asemejándose a Unity, GNOME 2, Mac, Windows… A continuación una galería con las disposiciones anunciadas.

Quizá lo más curioso de todo este entramado es que tiren de una aplicación de terceros como es Plank para hacer las veces de dock, pero es una solución inteligente, fiable y barata en relación al consumo añadido. De hecho, es una solución que vimos aplicada de manera idéntica recientemente, en LliureX 16. Y no solo se agrega o elimina Plank al cambiar de disposición de escritorio, también cambian los menús de aplicaciones y otros detalles. Lo mejor, sin duda, que todos los elementos son personalizables y existe una opción para guardar los diseños, por lo que a partir de la disposición que más guste se puede adaptar bastante.

¿Y bien? ¿Os convence la propuesta de Ubuntu MATE? La veremos concretada el próximo octubre.